Vacuna cubana Abdala: 90% de efectividad en pacientes graves, aún con la presencia de la variante delta del SARS-CoV-2
Aún en medio de un complejo escenario epidemiológico caracterizado por la presencia de la variante delta del coronavirus, de mayor transmisibilidad, periodo de incubación más corto y alta carga viral, la vacuna cubana Abdala muestra un 90 % de efectividad en pacientes graves, de acuerdo con información ofrecida por el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología en su red social Twitter.
CAPAC – Tomado de Cubadebate/ Video: Canal Caribe/ Foto: CIGB.
En su ensayo clínico fase III, el inmunógeno mostró un 92.28% de eficacia frente a la enfermedad sintomática., una eficacia del 100% para prevenir la enfermedad sistémica severa y un 100% para la prevención del fallecimiento en el grupo vacunado.
Abdala es la primera vacuna desarrollada y producida en Latinoamérica y que logró obtener uso de emergencia.
La efectividad del 90% de esta vacuna en pacientes graves, fue confirmada por científicos cubanos en días recientes durante un encuentro con el presidente del país, Miguel Díaz-Canel.
El vicetitular de la Sociedad Cubana de Higiene y Epidemiología, Pedro Mas Bermejo, comentó que el estudio se realizó entre julio y agosto pasado en los primeros siete municipios de La Habana donde tuvo lugar la intervención con este inmunógeno.
En declaraciones a la televisión nacional, el especialista señaló que se trata de niveles muy altos de efectividad, aún con la variante Delta del coronavirus, en comparación con otros estudios.
Lo anterior ratifica la importancia de ponerse la vacuna y confirma la fortaleza para prevenir las formas graves de la enfermedad, puntualizó.
Durante su explicación en el encuentro Pedro Mas Bermejo comentó que para emprender el estudio en los siete municipios de la capital se manejaron cifras con sumo rigor, alusivas a los que ya se han vacunado con Abdala. Y entre otros impactos, habló de la disminución de la tasa de incidencia de transmisión de la enfermedad en los primeros territorios intervenidos.
En cuanto a la mortalidad, dijo que se redujo en los municipios estudiados. Y en el caso de la letalidad, salió a la luz que en el momento de la investigación ella era inferior en los municipios alcanzados por la vacuna, en comparación con los lugares en que todavía no se estaba vacunando.
El impacto sobre la tasa de gravedad también fue en positivo. Sobre la distribución de los pacientes que estaban en unidades de cuidados intensivos según las dosis vacunales recibidas, el experto detalló que el 75% de ellos no habían recibido dosis alguna; los que ya tenían una primera dosis, representaban el 2% de los hospitalizados; y quienes habían recibido dos, eran el 2,8%.
Al hablar de las incidencias de los casos en la unidad de cuidados intensivos, según el estado de inmunización y los principales antecedentes patológicos de cada uno de los pacientes, Pedro Mas afirmó que hay una diferencia muy grande entre los inmunizados y los no inmunizados, y esto muestra un efecto protector de la vacuna en pacientes graves que padecen enfermedades como hipertensión arterial, diabetes, cardiopatías, y enfermedades pulmonares.