Encuentro Internacional de Publicaciones Teóricas de Partidos y Movimientos de Izquierda concluye en La Habana con llamado a la unidad
Necesidad de unir y concentrar acción en los puntos en común en lugar de las diferencias primó en la clausura, el próximo pasado 14 de febrero, del II Encuentro Internacional de Publicaciones Teóricas de Partidos y Movimientos de Izquierda.
CAPAC – tomado de Cubadebate
La necesidad de unir y de concentrar la acción en los puntos en común en lugar de las diferencias primó hoy en la clausura del II Encuentro Internacional de Publicaciones Teóricas de Partidos y Movimientos de Izquierda celebrada en el Palacio de Convenciones de La Habana.
Al dar lectura a la relatoría final del evento, Enrique Ubieta Gómez, director de la Revista Cuba Socialista y organizador de la cita, valoró de positivos los debates derivados del cónclave que durante tres jornadas reunió a más de un centenar de delegados cubanos y extranjeros para abordar los desafíos actuales para la difusión del pensamiento marxista en una realidad marcada por el monopolio exclusivo del poder hegemónico sobre los grandes medios de comunicación.
El ensayista cubano defendió la iniciativa de fundar espacios para la investigación y generación de teoría revolucionaria de la mano con plataformas comunes y mecanismos de debate sistemático en la intención de apretar filas entre las fuerzas de izquierda y llegar a consensos en temas urgentes.
A esa propuesta, la acompañó de la convicción de que sin una teoría sólida de fondo no hay movimiento revolucionario victorioso posible, lo cual refuerza la pertinencia de crear un consejo asesor internacional para el rescate del legado histórico marxista y la incorporación de la comunidad científica en pos de una concepción de la ciencia en función de la paz, acciones que se plantean acometer.
Reiteró el carácter continuista del encuentro con respecto a las cuestiones expuestas en su anterior edición más referentes a la voluntad de unir y articular principios y estrategias como requisito para garantizar el triunfo de las luchas.
Debemos desde la izquierda ser capaces de liderar de manera eficaz esos procesos y difundir a través de documento teórico conciencia y certeza de que un mundo mejor, además de posible, es imprescindible para la propia supervivencia de la humanidad, agregó.
El apoyo mayoritario a la causa palestina de los participantes del II Encuentro Internacional de Publicaciones Teóricas de Partidos y Movimientos de Izquierda fue patentado hoy con la aprobación de una declaración solidaria con ese pueblo.
Previo a la declaratoria, el eurodiputado español Manu Pineda se refirió a la cruda realidad que se vive en la actualidad a causa del accionar genocida desatado por el Estado de Israel contra la población civil indefensa.
El activista aseguró que en aquel escenario justo en estos momentos se libra una lucha sin tregua entre la humanidad y la barbarie, donde se decide el derecho a la vida de millones.
Manifestó que defender la causa palestina de tener un Estado propio y soberano es en estos momentos luchar por la justicia y la razón como se luchó en el pasado contra el odio, el supremacismo y el fascismo.
Si no se detiene de inmediato esa situación, las consecuencias pesarán durante décadas en la conciencia de la humanidad como la mayor catástrofe de tiempos recientes, perpetrada con la complicidad del imperialismo, advirtió.
Al dar lectura a la declaración, Pedro Penso, delegado venezolano, condenó el doble rasero con el que se ha tratado el tema desde los grandes medios en los que se habla de libertad y respeto a los derechos humanos cuando se encubre deliberadamente la delicada situación en Gaza.
El documento extendió el repudio enérgico a los responsables de las injusticias ocurridas, del genocidio y los desplazamientos forzosos de comunidades enteras, quienes deberán rendir cuentas por sus crímenes.
Concluyó el texto con un llamado a la comunidad internacional a no decaer en el reclamo por el cese al fuego, la apertura de un corredor humanitario para dar paso a la ayuda y encontrar un solución amplia, justa y duradera al conflicto.