Numerosas entidades se han sumado en los últimos meses al reclamo de una política justa hacia Cuba por parte del gobierno estadounidense. En esta ocasión 36 organizaciones  que representan a agricultores, agroecólogos, ecologistas, académicos, sociedad civil y movimientos de justicia climática enviaron una carta al presidente de Estados Unidos pidiendo un cambio de política hacia la Isla.

CAPAC- Tomado de Cubaminrex/ Foto: Ramon Espinosa/ AP.

Durante su campaña el mandatario estadounidense prometió revertir las políticas fallidas de su antecesor. En este sentido, los firmantes reclaman el cumplimiento de sus juramentos, a la par que piden atender las peticiones de millones de personas alrededor del mundo que se han unido a este reclamo, incluyendo 79 congresistas y otras organizaciones estadounidenses.

Los firmantes de la carta entregada este 5 de mayo, pertenecen a diferentes sectores de la sociedad civil y colaboran activamente con sus colegas cubanos o han participado en intercambios de conocimientos, para la búsqueda de soluciones a las múltiples crisis sociales y ecológicas.

El reclamo sintetiza la necesidad de poner fin a esta políticas que siguen, entre otras cosas, bloqueando la capacidad de Cuba para mitigar y adaptarse a la crisis climática; al tiempo que limita gravemente el desarrollo de sistemas alimentarios sostenibles y el derecho a la alimentación de Cuba.

Margarita Fernández, directora ejecutiva del Instituto de Agroecología del Caribe y coordinadora de la Red de Agroecología Cuba-Estados Unidos, señaló que recientemente el secretaria de Prensa de la Casa Blanca dijo que “los derechos humanos serán un pilar fundamental de la política estadounidense” hacia Cuba.

Así mismo, Fernández añadió que “las sanciones aplicadas por Estados Unidos limitan gravemente los derechos de los ciudadanos cubanos a la seguridad alimentaria, la resiliencia climática y la dignidad. Un enfoque político verdaderamente audaz, basado en los derechos, sería levantar por completo el bloqueo”.

El documento persigue el fin de impulsar medidas ejecutivas para restaurar las regulaciones que regían el comercio y los viajes a Cuba al punto que se encontraban antes del 20 de enero de 2017. También, plantea la necesidad de cesar inmediatamente la aplicación de cualquier sanción y restricción contra los alimentos, las medicinas y cualquier otra asistencia humanitaria a Cuba; así como la cooperación internacional y las restricciones a las transacciones financieras.

Otro de los aspectos que destaca en la carta es la petición de la reapertura en su totalidad de la Embajada y los servicios consulares de Washington en La Habana; además de los intercambios bilaterales en áreas esenciales como medio ambiente, sociedad civil y cooperación científica.

Como cuarto aspecto los solicitantes plantean poner en práctica la autoridad ejecutiva, a fin de que no se renueve la determinación anual de imponer sanciones en virtud de la Ley de Comercio con el Enemigo, lo que facilitaría mediante acción ejecutiva directa que Biden ponga fin al injusto bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por más de medio siglo.

La misiva se envía en el marco de los primeros 100 días de gobierno de la administración Biden- Harris, en los que no se ha implementado ninguna acción para revertir las más de 200 medidas tomadas por Trump contra la Isla. Además, busca ser un llamado de atención ante el venidero 23 de junio, fecha en la que Cuba presentará ante la ONU la resolución “Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba” y que cada año es respaldada mundialmente.