Un oficial de campo de la Resistencia Islámica aseguró bajo condición de anonimato que han utilizado sólo una ínfima parte de su arsenal en sus enfrentamientos con el ejército israelí en la frontera entre el Líbano y la Palestina ocupada.

CAPAC – tomado de Al Manar en castellano – fuente: Al Akhbar

Un oficial de campo de la Resistencia Islámica, el brazo armado de Hezbolá, aseguró bajo condición de anonimato que la Resistencia ha utilizado sólo una ínfima parte de su arsenal en sus enfrentamientos diarios con el ejército israelí en la frontera entre el Líbano y la Palestina ocupada.

“Incluso con las armas que hemos probado de forma muy limitada, no hemos utilizado toda la gama que tenemos”, dijo, bajo condición de anonimato, en una entrevista con el columnista de cuestiones israelíes del diario Al-Akhbar.

Y agregó: “Siempre estamos en estado de superioridad y en la posición de quien tiene la iniciativa. En la situación actual, no necesitamos revelar todas nuestras cartas”.

«Siempre estamos en estado de superioridad y en la posición de quien tiene la iniciativa»

oficial de la resistencia islámica

Estado de inconstancia con el ejército israelí

Cuando se le preguntó por el número mártires en las filas de la resistencia, respondió: “Con el ejército enemigo estamos constantemente en un estado de inconstancia. Cada bando cambia de táctica dependiendo de los acontecimientos sobre el terreno. Inicialmente, varios mártires cayeron porque el enemigo adoptó tácticas para las cuales rápidamente encontramos soluciones, lo que llevó a una disminución en el número de mártires. Cuando vuelve a aumentar, significa que han corregido sus tácticas, lo que nos obliga a nosotros a cambiarlas, etc.”

Según él, la situación actual es la de una “guerra incompleta” y “no requiere que seamos completamente invisibles. Pero más allá de algunos errores humanos, encontramos soluciones que ayudaron a reducir el número de mártires.”

Hezbolá ha anunciado el martirio de 120 combatientes en el camino a Al Quds desde el 8 de octubre, cuando lanzó sus ataques contra posiciones fronterizas israelíes en apoyo al pueblo palestino en la Franja de Gaza y su resistencia.

Entre esta fecha y el 14 de diciembre, enumeró 509 operaciones de resistencia, incluidas 59 contra cuarteles y posiciones militares.

En uno de sus dolorosos ataques, el lunes 18 de diciembre, su artillería alcanzó por primera vez dos plataformas del sistema israelí Cúpula de Hierro en el asentamiento de Kabri, situado a 7 km de la frontera libanesa, al este de la colonia costera de Naharia. Es este sistema el que intercepta cohetes de corto alcance y drones.

Más de 100.000 habitantes de las colonias del norte se vieron obligados a evacuar estas últimas en los primeros días de la ofensiva. Sus líderes descartan la posibilidad de regresar allí mientras los combatientes de la resistencia islámica estén desplegados a lo largo de la frontera. Los líderes israelíes enviaron amenazas en este sentido a los líderes libaneses a través de mediadores internacionales, en particular los franceses.

“Por supuesto que estamos preparados para todas las eventualidades, pero descartamos la posibilidad de que el enemigo pueda abrir dos frentes al mismo tiempo”, subrayó, sin embargo, el oficial refiriéndose también al frente de la Franja de Gaza.

«Descartamos la posibilidad de que el enemigo pueda abrir dos frentes al mismo tiempo»

oficial de la resistencia islámica

50.000 soldados israelíes en la frontera

Al analizar la presencia de tropas israelíes en el norte, estimadas en 3 divisiones del ejército, o el equivalente a 50.000 soldados, cree que su objetivo es aliviar las secuelas de los ataques de la resistencia que tuvieron como objetivo sus radares de vigilancia y sistemas de espionaje.

A falta de este equipamiento que evitó que sus hombres se acercaran a la frontera, desplegó tres líneas defensivas: la primera en las posiciones fronterizas y las colonias fronterizas, la segunda alrededor de las colonias situadas a dos kilómetros de la frontera y la tercera a una profundidad de 7 kilómetros.

Señala también las nuevas tácticas adoptadas por primera vez por el ejército israelí: la de circular en vehículos civiles, la de atacar periódicamente las zonas fronterizas, el fuego preventivo sobre las regiones que supuestamente se utilizarían para disparar contra sus fuerzas, así como la vigilancia constante de sus servicios de inteligencia en las zonas vecinas.

El oficial de la resistencia también cita la campaña mediática de intimidación como táctica para que la situación no siga como antes.

Según él, la magnitud de las pérdidas del enemigo en la recopilación de información es significativamente mayor que la de la resistencia, que pudo recuperar el 95% de sus capacidades de antes de la guerra.

“Nuestros drones de reconocimiento vuelan constantemente sobre suelo enemigo y algunos drones se alejan y luego regresan sin que el enemigo pueda derribarlos”, añadió.