Hugo Chavez Frías, su vida, su historia, a 66 años de su nacimiento
A 66 años de su nacimiento, en ésta extensa nota se refleja la vida y la historia del Comandante Hugo Chavez, su niñez, adolescencia, las fuerzas armadas y su lucha antiimperialistas y la construcción de la unidad latinoamericana.
CAPAC – fuente Acercándonos Cultura
Hugo nació en Sabaneta (Estado Barinas, Venezuela), el 28 de julio de 1954. Siendo el segundo de los seis hijos del hogar formado por Hugo de los Reyes Chávez y Elena Frías, ambos maestros de educación primaria. Creció en la humildad en un pequeño pueblo del llano venezolano, por lo que a corta edad, sus padres lo llevaron con su abuela paterna, Rosa Inés Chávez, para que se ocupara de su crianza. Desde joven se volvió un aficionado al béisbol, fue monaguillo y poseía inclinaciones por la pintura, la música, la escritura creativa y el teatro.
Los estudios primarios los realizó en el Grupo Escolar Julián Pino (1966) y posteriormente cursó el bachillerato en el Liceo Daniel Florentino O’Leary de Barinas donde obtuvo el título de Bachiller en Ciencias en 1971, durante su etapa en ese centro de estudios participa en los Campeonatos de béisbol y softbol con los Criollitos de Venezuela (1969).
Tres semanas después de obtener el titulo de bachiller ingresó a la Academia Militar de Venezuela del Ejército Nacional de Venezuela, donde se graduó y recibió el título de licenciado en Ciencias y Artes Militares, en la especialidad de Ingeniería, mención terrestre, egresando con el grado de subteniente, el 5 de julio de 1975. En ese mismo año realiza un curso en Comunicación, en la Escuela de Comunicación y Electrónica de las Fuerzas Armadas, ocupó el tercer lugar entre 25 alumnos.
Se destacó por obtener las más altas calificaciones en los diversos cursos que realizó en el seno de las Fuerzas Armadas. Más tarde, en el año de 1977 es ascendido a teniente y realiza el Curso Medio de Blindados del Ejército en 1979, donde ocupa el primer lugar entre todos los alumnos. Ya para el año de 1982 es ascendido a capitán, luego realiza el Curso Avanzado de Blindados en 1983 donde ocuparía nuevamente el primer lugar entre todos los alumnos. Después fue profesor de estudios superiores.
En las Fuerzas Armadas Nacionales ocupó variados cargos: Comandante del Pelotón de Comunicaciones, Batallón de Cazadores Cedeño, Barinas, Cumaná, 1975-1977. Comandante de Pelotón y Compañía de Tanques AMX-30, Batallón Blindado Bravos de Apure, Maracay 1978-1979. Comandante de Compañía y jefe del Departamento de Educación Física en la Academia Militar de Venezuela, 1980-1981. También fue jefe del Departamento de Cultura de la misma Academia en 1982.
En el año 1982 (año bicentenario del natalicio de El Libertador) crea el Ejército Bolivariano 200 (EB-200) a través del juramento simbólico de tres capitanes de la Promoción Simón Bolívar (Jesús Urdaneta Hernández, Felipe Acosta Carlés y Hugo Chávez Frías), al pie del Samán de Guere, símbolo de las tres raíces: bolivariana, robinsoniana y zamorana, de la revolución. En el año 1989 el EB-200 se transformó en MBR-200.
Comandante Fundador de la Compañía José Antonio Páez, Curso Militar, Academia Militar de Venezuela, 1983-1984. Comandante del Escuadrón de Caballería Francisco Farfán, Elorza Apure, 1985-1986. Comandante Fundador del Núcleo Cívico-Militar del Desarrollo Fronterizo Arauca-Meta, 1986 a 1988. Jefe de Ayudantía del Consejo Nacional de Seguridad y Defensa, Palacio Blanco, Miraflores, 1988-1989. Oficial de Asuntos Civiles, Brigada de Cazadores, Maturín, 1990.
Participó en el Curso Internacional de Guerras Políticas realizado en Guatemala en 1988. Luego cursa una maestría en Ciencias Políticas en la Universidad Simón Bolívar en los años 1989 y 1990, tesis por terminar. Continuó luego su brillante carrera militar en las Fuerzas Armadas hasta ascender al grado de teniente coronel en 1990. Por último, realiza un Curso de Comando y Estado Mayor en la Escuela Superior del Ejército en los años de 1991 y 1992, es este periodo también comanda el Batallón de Paracaidistas Coronel Antonio Nicolás Briceño, Cuartel Páez, Maracay.
El 4 de febrero de 1992 unos dos mil 357 jóvenes militares guiados por Chávez, entonces teniente coronel, se alzaron contra el paquete de medidas económicas neoliberales del Fondo Monetario Internacional (FMI) implementadas por el presidente venezolano de la época, Carlos Andrés Pérez. Los participantes pertenecían a 10 batallones de las guarniciones militares de los estados Aragua, Carabobo, Miranda, Zulia y el Distrito Capital. Muchos de los integrantes del grupo formaban parte del Movimiento Bolivariano Revolucionario 200, cuya ideología política estaba basada en el pensamiento de Simón Bolívar.
En Maracaibo, Francisco Arias Cárdenas logró apoderarse de la sede del gobierno regional y toma prisionero al Gobernador del Zulia, Oswaldo Álvarez Paz. En Caracas, Chávez establece su centro de operaciones en la sede del Museo Histórico Militar, ubicado en La Planicie, en inmediaciones del Palacio de Miraflores, mientras que sus fuerzas toman la estación estatal Venezolana de Televisión. Otro grupo se enfrenta a la Guardia Nacional en La Casona, mientras que otros intentaron tomar el Palacio de Miraflores.
El intento por derrocar al gobierno de Pérez y orientar la vida del país por un camino de justicia social falló, y todos los participantes en esta acción fueron llevados a prisión.
La causa fue sobreseída y los militares fueron puestos en libertad dos años después, durante la presidencia de Rafael Caldera.
Chávez, tras ser aprehendido el mismo día de la rebelión, agradeció «a los valientes soldados» del Regimiento de Paracaidistas de Aragua y en la Brigada Blindada de Valencia su valentía en la operación:
«Lamentablemente, por ahora, los objetivos que nos planteamos no fueron logrados en la ciudad capital (…) Nosotros, acá en Caracas, no logramos controlar el poder. Ustedes lo hicieron muy bien por allá, pero ya es tiempo de reflexionar y vendrán nuevas situaciones y el país tiene que enrumbarse definitivamente hacia un destino mejor.
Hugo Chávez, 4 de febrero de 1992″
El recuento de muertos se dio a conocer el día 5 de febrero. De acuerdo a cifras oficiales del Ministerio de la Defensa, hubo 14 muertos y 53 heridos. No obstante, estimaciones extraoficiales ubican dicho saldo en 50 muertos y más de 100 heridos.
Los combatientes en Valencia y Maracay se rindieron, mientras Chávez era llevado prisionero al Cuartel San Carlos al norte de Caracas. Al día siguiente de la rebelión, el ex-presidente Rafael Caldera, parlamentario y principal dirigente del Partido Social Cristiano COPEI (COPEI), dirigió un discurso ante el Congreso en el que atacó duramente a Pérez, justificando en cierta forma el alzamiento militar.
A los pocos días, el gobierno decide trasladarlo a una cárcel ubicada en San Francisco de Yare, estado Miranda. El 27 de noviembre de ese mismo año otro grupo de oficiales, generalmente de la Fuerza Aérea, se sublevan infructuosamente contra el gobierno. Todos estos hechos debilitaron al gobierno de Carlos Andrés Pérez. Se inició un juicio en el Congreso que culminaría con su remoción de la presidencia el 20 de mayo de 1993, acusándolo de corrupción.
Pocos meses después Caldera se deslinda del COPEI, fundó «Convergencia» y se lanza a la candidatura para las elecciones presidenciales de 1993, las cuales ganó, mientras que Chávez, desde la cárcel llamó a la abstención.
Chávez, junto con los principales líderes de la intentona, pasó 2 años en la prisión de San Francisco de Yare esperando juicio. Allí co-escribió Cómo salir del laberinto, mientras su popularidad aumentaba.
En el año 1994, como consecuencia de las demandas del pueblo venezolano, el entonces presidente Rafael Caldera le concede la libertad al líder del levantamiento, otorgándole a él y a varios de sus compañeros de lucha el sobreseimiento de la causa que los mantenía prisioneros. Chávez sale de prisión el 26 de marzo de 1994, a partir de entonces se inició un nuevo capítulo en la historia de las luchas populares venezolanas.
De la cárcel, lugar donde se consagró al estudio, reflexión y análisis de la realidad nacional e internacional, salió a recorrer todos los confines patrios, reivindicando predicamentos libertarios y justicieros que fueron compartidos por vastos sectores de la población. Para llevar a cabo su programa popular al poder funda entonces, junto con un calificado grupo de armas, el Movimiento V República.
Chávez asumió por primera vez la presidencia de Venezuela en enero de 1999, tras derrotar en los comicios celebrados el 6 de diciembre de 1998 al empresario y economista Henrique Salas Römer, por entonces gobernador del petrolero estado Zulia, quien fue postulado por Proyecto Venezuela, un partido que él mismo fundó.
Salas Römer recibió a última hora el respaldo del socialdemócrata Partido Acción Democrática (AD) y del socialcristiano Comité de Organización Política Electoral Independiente (COPEI), que se habían repartido el poder en Venezuela desde los años 60, pero sólo recibió 2,6 millones de votos, equivalentes al 39,97 por ciento.
Por su parte, Chávez, quien concurrió respaldado por el Movimiento V República (MVR) y apoyado por varias organizaciones agrupadas en el Polo Patriótico, fue electo al conseguir tres millones 673 mil 685 votos, cifra equivalente al 56,2 por ciento de los sufragios válidos.
Ese resultado fue el segundo mayor porcentaje obtenido por un candidato presidencial durante las cuatro décadas anteriores en Venezuela y permitió al líder bolivariano suceder al mandatario precedente, el socialcristiano Rafael Caldera, quien ocupó dos veces el cargo (1969-1974 y 1994-1999).
En febrero de 1999 asume la primera magistratura y promete realizar una Asamblea Constituyente para redactar una nueva Constitución que estuviere acorde a los nuevos tiempos venezolanos, de hecho se realizo y puso su cargo a la orden del órgano Supraconstitucional (todo esto bajo un régimen de paz y Democracia), el 9 de agosto de ese mismo año La Asamblea Nacional Constituyente le vuelve a tomar juramento como primer Mandatario de la República de Venezuela.
En diciembre de este mismo año (1999) el día 15 el pueblo venezolano va a un referéndum para decidir si se aprueba la nueva Constitución Bolivariana de Venezuela a través del sufragio directo, universal y secreto. Dicha propuesta fue respaldada de manera mayoritaria y quedando publicada en Gaceta Oficial el 30 de diciembre de 1999. Se reinstaura con ello una sociedad democrática, participativa, protagónica, multiétnica y pluricultural; enmarcada en un Estado descentralizado y de justicia federal que asegura el derecho a la vida, al trabajo, la cultura, la educación, la justicia social y la igualdad sin discriminación ni subordinación alguna.
Este hecho convirtió a Hugo Chávez Frías en el propulsor de un nuevo ciclo histórico para Venezuela, en virtud de que con él, las viejas estructuras de poder se agrietaron, cedieron y terminaron por colapsar; surgiendo entonces, por todos los poros de la sociedad, fuerzas y corrientes alternativas de cambio impregnadas de esperanzadoras demandas e inéditos desafíos.
La nueva Carta Magna estableció períodos presidenciales de seis años -en lugar de los cinco aprobados hasta entonces-, que comenzarían siempre el 10 de enero del año siguiente a la elección del mandatario. Sobre las nuevas bases establecidas en el texto constitucional, el 30 de julio del 2000 se efectuaron elecciones generales, en las que, además del Jefe del Estado, la población votó para elegir a gobernadores, alcaldes y diputados al Parlamento. Como mandatario en funciones, Chávez concurrió para optar por la reelección en estos comicios, que como dato curioso no contó con candidatos de los tradicionales AD y Copei.
El principal contrincante del presidente fue Francisco Arias Cárdenas, su compañero de armas y amigo personal, participante en la rebelión de militares progresistas que lideró Chávez en 1992, pero distanciado en ese entonces del jefe del Estado. En su campaña, Arias Cárdenas se presentaba como el candidato del consenso para todos los sectores de la sociedad y llegó a declarar que la Revolución Bolivariana se había desviado de sus orígenes.
Sin embargo, en la cita, Chávez fue reelegido al obtener tres millones 757 mil 773 votos, cifra equivalente al 59,76 por ciento de los sufragios, mientras que por Arias Cárdenas optaron algo más de 2,3 millones de votos, el 37,52 por ciento del total.
Años después, Arias Cárdenas y Chávez se reconciliaron y actualmente es vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) para los estados Falcón y Zulia, y candidato para la gobernación de Zulia en las elecciones regionales de diciembre de este año.
El 19 de agosto de 2000 toma juramento nuevamente como primer mandatario ante la nueva Asamblea Nacional de Venezuela para el periodo 2000 – 2006, de esta forma se convierte en el último Presidente venezolano del siglo XX y el primero del nuevo milenio.
A partir del año 2000 se da inicio a la V República, donde se aspira transformar pacíficamente las bases tradicionales del Estado por un nuevo modelo, revolucionario y pacífico, sentando sus bases al aprobarse la nueva constitución y Asamblea Nacional, entre otros.
Dos grupos importantes de leyes habilitantes fueron activados por el presidente Hugo Chávez entre los años 1999 y 2001. Entre ellas destacan las leyes tributarias, la eliminación de algunos organismos públicos, la modernización de los trámites administrativos y las relaciones entre el Estado y el sector privado.
Durante el 2001 el presidente Chávez también concreta la creación del sistema microfinanciero, así como de las leyes que regulan las actividades productivas del sector privado. Asimismo, se reforma la Ley de Hidrocarburos y se crea el Banco de Desarrollo Económico y Social de Venezuela. Se retoma de este modo la industria petrolera como empresa perteneciente a la Nación. Asimismo, se diseña el documento Líneas Generales del Plan de Desarrollo Económico y Social 2001 – 2007 el cual se fundamenta en la interacción de los cinco ejes de equilibrio: el económico, el social, el político, el territorial y el internacional. De esta forma, Venezuela se convirtió en el primer país del continente que logró construir un programa estratégico económico-social fuera de las recetas de los organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial diseñadas para América Latina y el Caribe.
El año 2002 estuvo marcado por el Golpe de Estado del 11 de abril engendrado desde el llamado a paro laboral promovido por la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (FEDECAMARAS), la Central de Trabajadores de Venezuela, partidos políticos de derecha y sectores militares contrarios a la transformación de la sociedad.
La planificación y puesta en ejecución del plan golpista contó con la aprobación y el apoyo del Gobierno Estadounidense bajo conducción de la administración Bush. Su objetivo principal fue impedir la ejecución de las Leyes Habilitantes para dar al traste con la adecuación del Estado y la sociedad Venezolana a los tiempos de Revolución Socialista.
La activación de la plataforma opositora Nacional junto a las redes de apoyo internacional de esta, propiciaron los nefastos acontecimientos del 11 y 12 de abril, donde los sectores de derecha empleando el poder de los medios de comunicación, tendieron una celada a sus propios partidarios dirigiéndoles a un escenario de conflicto. A través del uso de franco tiradores y elementos policiales que accionaron contra partidarios del gobierno y de la oposición indiscriminadamente; hubo decenas de muertos y heridos como justificación para el pronunciamiento de efectivos militares apátridas quienes se declararon en abierta insubordinación contra la democracia y las instituciones del pueblo.
El pueblo al reconocer las luchas del Gobierno Bolivariano como suyas, desde un principio se lanzó a la calle en respaldo a la gestión del Presidente Chávez, millones de venezolanos usaron la verdad y fortaleza de la unidad popular para exigir la liberación del legítimo Mandatario Nacional.
Afortunadamente al igual que en el pasado nuestras Fuerzas Armadas son la representación del pueblo uniformado, los militares conscientes herederos de la tradición Bolivariana deciden ponerse de lado de las mayorías, una a una las guarniciones militares desobedecen el Gobierno de facto de Pedro Carmona Estanga decidiendo plegarse a al clamor del pueblo y emprender la operación rescate de la dignidad, que terminaría con el regreso de Chávez, de la Isla la Orchila desde donde se pretendía expulsarle del país.
La jornada del 13 de abril definió para siempre, una de las principales fortalezas del Gobierno Bolivariano: La unidad cívico militar, que tuvo su prueba de fuego en el año 2002 y que se ha mantenido alerta ante las pretensiones del gran capital y la burguesía nacional de borrar la experiencia exitosa del Socialismo Bolivariano.
En el argot popular la población identificada con el proceso de cambio social a la hora de evocar los sucesos del golpe de estado ha construido el siguiente refrán “Cada 11 tiene su 13″.
Posteriormente, el presidente invoca al diálogo constructivo en bien del país. Como medida singular, Hugo Chávez pide perdón por los errores que hubiera cometido. No obstante, las apetencias políticas de los grupos opositores vuelven a insistir en la salida violenta del Jefe de Estado y promueven el golpe petrolero. Nuevamente Chávez debe afrontar duras circunstancias debido a que la mayor parte de la dirigencia petrolera, en acto calificado como traición a la patria, inflige daños severos a la población, mediante el secuestro técnico de la industria.
En el 2003 el Presidente Hugo Chávez Frías, en conjunto con el pueblo y las fuerzas militares, toma una serie de decisiones encaminadas a contrarrestar el ataque de la contrarrevolución interna y las potencias occidentales. A pesar del sabotaje petrolero, durante el año 2003 PDVSA incrementó sus ganancias en 1,5 millardos de dólares, alcanzando un ahorro de 3.100 millones de dólares. A raíz del golpe de Estado del 11 de abril de 2002 y del sabotaje petrolero de diciembre del mismo año, el gobierno de Hugo Chávez Frías desarrolló una campaña internacional para informar al mundo sobre la verdadera situación política y económica venezolana, logrando de esta manera aclarar algunas informaciones falsas o manipuladas que confundieron a muchos líderes y pueblos de otras esferas. Asimismo, la política exterior venezolana logró extenderse con la firma de convenios bilaterales en materia energética, agroalimentaria, comercial, industrial promovidos por la política gubernamental del Presidente.
Durante el resto del año 2003, la oposición continuó sus marchas, disturbios y cacerolazos promovidos por la Coordinadora Democrática, los canales de televisión, la patronal Fedecámaras y sus empresarios aglutinados, además del sindicato CTV y la iglesia católica, para forzar la renuncia de Chávez.
Finalmente, y ante la incapacidad de derrocar al presidente por medios violentos, la oposición, agrupada en una coalición denominada Coordinadora Democrática, aceptó la opción del plebiscito, contemplada en la Constitución Bolivariana de 1999.
Después de muchos debates y cuestionamientos mutuos, en mayo de 2004 la oposición logró reunir dos millones 436 mil 830 firmas, monto mínimo establecido por la constitución como requisito para convocar un referendo, que el Consejo Nacional Electoral fijó para 15 de agosto de ese año.
En el referendo, que la oposición llamó revocatorio y los chavistas calificaron de ratificatorio, se escrutaron nueve millones 789 mil 637 votos válidos, de un padrón electoral integrado por poco más de 14 millones de electores.
Y tampoco por la vía electoral la oposición logró esta vez derrocar al presidente, pues por el NO, es decir, contra la destitución de Chávez, se pronunciaron cinco millones 800 mil 629 venezolanos, para el 59,10 por ciento del total, mientras la opción contraria recibió tres millones 989 mil ocho sufragios, el 40,64 por ciento.
El 2005 estuvo marcado por el salto hacia la construcción del socialismo del Siglo XXI, donde la gestión gubernamental del presidente Hugo Chávez logró posicionar la influencia y expansión de las misiones sociales. Estos programas masivos contribuyeron con el nacimiento de la nueva institucionalidad y la nueva visión social que fundamenta el proceso revolucionario, puesto que conforman estructuras emergentes que dan viabilidad a un cambio institucional donde varias organizaciones trascienden los ámbitos exclusivos de competencia para lograr un fin común.
Asimismo, con la finalidad de romper con los patrones tradicionales de la economía mundial, la gestión del presidente Hugo Chávez logró que la República Bolivariana de Venezuela comenzara a caminar de manera autónoma e independiente del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, entes promotores de las políticas neoliberales del imperio.
En este sentido, comenzó a ser una realidad la propuesta ideada e impulsada por el Presidente de la República: nace la Alternativa Bolivariana para la América (ALBA), promoviendo la verdadera unión de los pueblos para contrarrestar los efectos del Tratado del Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA).
Otro aspecto que representó un avance fundamental para Venezuela, fue el inicio del proceso de ingreso al Mercado Común del Sur (Mercosur) y la aceleración de medidas que permitieron la ubicación del Producto Interno Bruto (PIB) en un 9,4% durante el año 2005, marcando nueve trimestres consecutivos de crecimiento económico sostenido. Igualmente, se incrementó la producción del hierro, el aluminio y el acero batiendo récords históricos; se incrementó la producción agrícola en distintos rubros, el comercio y la inversión internacional, entre otros. La inflación cerró en 14,4% este año.
Una vez vencido el período constitucional de seis años, el Poder Electoral convocó para el domingo 3 de diciembre de 2006 elecciones presidenciales. A partir de todos los fracasos anteriores, los sectores opositores llegaron a la conclusión de que es imposible vencer a Chávez en las urnas si no se presenta un candidato único y decidieron escogerlo entre todos los que aspiraban al cargo, en elecciones primarias convocadas para el mes de agosto, pero que finalmente no se realizaron.
Fue Manuel Rosales, gobernador del estado Zulia y candidato del partido Un Nuevo Tiempo, quien fue elegido «de dedo» para representar a todas las formaciones políticas opositoras en esos comicios.
Entre sus antecedentes políticos figura su firma en nombre de todos los gobernadores en respaldo del decreto que nombró presidente de la República al golpista Pedro Carmona Estanga en abril de 2002, acción sobre la cual dijo años más tarde que fue «un momento de confusión» y que lo hizo «con la mejor de las intenciones por el bienestar del país».
El apoyo de 44 formaciones políticas opositoras tampoco fue suficiente esta vez y el día de las elecciones votaron por Manuel Rosales cuatro millones 292 mil 466 venezolanos, equivalentes al 36,91 por ciento de los votos válidos, mientras que Chávez fue reelegido nuevamente con el favor de siete millones 309 mil 80 electores, el 62,85 por ciento del total.
Años después, en abril de 2009 Rosales fue formalmente acusado de enriquecimiento ilícito durante su gestión como gobernador de Zulia, pero el juicio no llegó a efectuarse debido a que viajó a Perú, donde solicitó asilo político y donde permanece desde entonces. Su esposa, Eveling Trejo, es actualmente la alcaldesa de Maracaibo, capital de ese rico estado venezolano.
El año 2006 trajo consigo una nueva oportunidad para ratificar tanto la legitimidad democrática, como la trascendencia y la prolongación del Proyecto Simón Bolívar 2000 a través de la participación popular.
Del mismo modo, con el objetivo de fortalecer la soberanía económica de Venezuela y dirigir los ingresos petroleros hacia el fortalecimiento de los planes sociales de gobierno, PDVSA invirtió -en el marco del Plan Siembra Petrolera- 5 mil 940 millones de dólares en el país, para el desarrollo del Proyecto Delta Caribe del Complejo Industrial Gran Mariscal de Ayacucho y la infraestructura del gasoducto transoceánico (Colombia, Panamá y Venezuela), así como para el desarrollo del sub-proyecto Magna Reserva dirigido al tratamiento de la Faja Petrolífera del Orinoco.
Con el objeto de corregir los percances presentados en el seno de la administración pública y organizaciones políticas, en el proceso de consolidación del socialismo bolivariano, el Comandante Presidente Hugo Chávez presento a la sociedad venezolana, la propuesta de revisión, rectificación y reimpulso de los programas y proyectos del Gobierno Bolivariano, en pro de la consolidación del modelo de sociedad que enarbole los valores de justicia social y solidaridad propios del socialismo.
Asimismo, el Ejecutivo Nacional ofreció el significado de cada una de las R y explicó: “Revisión es volver a ver todo, empezando por el gobierno y primerito por Hugo Rafael Chávez Frías”. “La revisión debe llevar no sólo los ejercicios teóricos sino que debe llevar a rectificar las ideas y el reimpulso es reimpulso de la moral, es revolucionar en todos los ámbitos.
El Presidente Chávez también consideró que “estas tres R tienen que ser aplicables en lo social, en lo moral, en los gobiernos locales, regionales, en la política internacional, en los procedimientos burocráticos que tenemos”.
Durante la emisión del «Aló Presidente» el primero del año se presentó el nuevo equipo de trabajo y llamo a los sectores que lo respaldan y a los que lo rechaza a trabajar juntos sobre todo a la clase media que a su parecer se encuentra la mayor parte de las personas que no lo respalda la llamo a incorporarse a la revolución, este sector siempre fue visto por el como parte de la oligarquía venezolana, llamo a los pequeños y medianos empresarios e incluso a los grandes productores que siempre lo han visto como enemigo, incluso llamo a la burguesía nacional a trabajar por el país.
Además como una muestra de la aplicación de cambios en la forma de concebir la política, en las elecciones a gobernadores y alcaldes del 2008, los candidatos no fueron seleccionados a dedo sino por las comunidades, se relanzó el polo patriótico para las elecciones, llamo a luchar por la inseguridad y la corrupción administrativa, por otro lado anuncio para el 12 de enero el congreso del PSUV, como estructura política de vanguardia en el proceso político que atraviesa el país, también promulgo la Ley de amnistía donde dejo libre a muchos que estuvieron involucrados en el golpe del 11 de abril del 2002 y otros hechos de violencia contra el Gobierno y la sociedad venezolana.
Gracias a la implementación de las tres R, la alianza de las fuerzas progresistas logró mantener el control político de la mayoría de las gobernaciones y alcaldías a nivel nacional, en los comicios regionales celebrados en el año 2008.
En el marco de la celebración de los diez años transcurridos desde la asunción del comandante Hugo Chávez a la Presidencia de la República aparece este discurso que representa el informe de gestión del Gobierno Bolivariano durante el año 2008. Todos los años, ante el cuerpo legislativo, el presidente Hugo Chávez realiza esta presentación y da a conocer los principales logros de su gestión de gobierno. Sin embargo, en esta ocasión, la exposición presidencial se realiza en un momento particularmente histórico: la primera década de la Constitución Bolivariana -la carta de navegación aprobada por el pueblo en 1999- y los primeros veinte años de la Revolución -a partir de la explosión de Caracas en 1989.
Los logros revolucionarios que el Presidente enumera en su discurso corresponden, principalmente, al año 2008, pero se entienden en este contexto y se insertan en el sentido que ha tomado la marcha nacional, con la Constitución y el Proyecto Nacional Simón Bolívar, el primer plan socialista de la nación
Los logros revolucionarios que el Presidente enumera en su discurso corresponden, principalmente, al año 2008, pero se entienden en este contexto y se insertan en el sentido que ha tomado la marcha nacional, con la Constitución y el Proyecto Nacional Simón Bolívar, el primer plan socialista de la nación.
En su alocución, el presidente Chávez no sólo coloca estos logros en el plano de lo concreto, de las cifras inexorables: nuevas universidades, sistemas de riego, crecimiento de la economía, más tierras cultivadas, aumento del Índice de Desarrollo Humano, de la esperanza de vida, reducción drástica de la pobreza y de la desigualdad -medida a través del llamado Índice de Gini-; las impresionantes estadísticas de las misiones sociales, convertidas en el núcleo central de la política del gobierno revolucionario, entre otros.
Expresa también las ideas que sustentan y permiten la obtención de estos logros, destinados a alcanzar la mayor suma de felicidad posible. Se trata de ideas fundamentales del pensamiento revolucionario que entiende el poder, por ejemplo, no como un fin, sino como “un instrumento para hacer justicia y, además, un instrumento para redistribuirlo y cada día transferirle mayores cuotas de poder político, económico, al pueblo, a la mayoría, a la nación”. El lazo, la conexión entre ideas y cifras -que más que cifras son logros con rostros, nombres y esperanzas- permiten una mayor comprensión del proyecto bolivariano.
Permite, además, el optimismo sobre el rumbo de Venezuela. Y facilita una visión más amplia del contexto en el cual surge la propuesta histórica de una enmienda constitucional que otorgue al pueblo un poder adicional: ante un buen gobierno, la posibilidad de reelegir a un gobernante, conservando siempre el poder de revocarle o de no reelegirlo en su momento. Dada entonces su importancia, asumimos la tarea de difundir este discurso -incorporando además las gráficas y cuadros estadísticos que lo complementan-, a fin de enriquecer la discusión sobre el proyecto bolivariano y su promesa de consolidar la patria socialista.
En las elecciones del 7 de octubre de 2012, Chávez se presentó a reelección nuevamente teniendo como principal adversario a Henrique Capriles Radonski, del partido Primero Justicia, quien fue elegido candidato único de la mayoría de las formaciones opositoras agrupadas en la llamada Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en las primarias del 12 de febrero pasado. Aunque a la cita concurrieron otros cinco aspirantes, la contienda se centró entre el mandatario y el candidato de la MUD, los únicos con posibilidades reales de resultar elegidos.
En esos comicios se jugó el futuro de la Patria, según ha proclamó Chávez en numerosas oportunidades, y argumentó que el programa de su oponente está dirigido a desmontar todo lo logrado por la Revolución Bolivariana desde enero de 1999 y volver a privatizar las principales industrias, especialmente la petrolera y entregar el país a las transnacionales estadounidenses y europeas.
Empresas consultoras de todos los colores políticos y con destacada trayectoria profesional toman el pulso desde hace meses a la opinión pública nacional y todas coinciden al pronosticar la reelección del mandatario con ventajas que oscilan de unas a otras entre los 15 y 25 puntos porcentuales.
Desde mediados del año, en prácticamente todas las actividades públicas de su campaña, el líder bolivariano insiste en la necesidad de que en su trabajo proselitista los activistas de su comando electoral vayan más allá de los chavistas convencidos y se acerquen a la clase media, a los indecisos.
Aspectos señalados en la Propuesta de Gobierno de Chávez:
– Defender, expandir y consolidar el bien más preciado que hemos reconquistado después de 200 años: la independencia nacional (…) el primer gran objetivo histórico, para el próximo periodo de Gobierno Bolivariano y socialista, será defender y consolidar el bien más preciado que hemos logrado: la Independencia política; reafirmar nuestra identidad nacional y americana, así como seguir avanzando en el marco de una audaz geopolítica internacional hacia nuestra plena independencia económica.
– Garantizar el manejo soberano del ingreso nacional. El manejo soberano del ingreso nacional supone la capacidad de captarlo y de emplearlo en los objetivos socialistas, humanistas y naturalistas. El Estado debe ser diseñado de manera que la administración de ese ingreso nacional sirva a los objetivos de apalancamiento de la nueva sociedad.
Dada nuestra condición de país rentista petrolero (lo cual debe ser revertido a través de una política de transformación hacia un modelo productivo socialista), nuestro ingreso nacional se sustenta en el desenvolvimiento de la actividad petrolera.
En tal sentido, para garantizar el objetivo de un manejo soberano de los ingresos, se hace necesario el control de la actividad petrolera, a través de una política nacional, popular y revolucionaria. La política tiene que ser nacional, porque se trata de la administración de los recursos que son propiedad de todos los venezolanos, lo cual nos obliga a administrarlos para el beneficio de toda la Nación. Por intermedio de un manejo con visión nacional se pretende alcanzar el absoluto control de la actividad petrolera en el país, tal como lo establece la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, la cual, de manera muy clara, expresa que es el Estado, como representante del interés colectivo de todos los venezolanos, el propietario de los recursos que se encuentran en nuestro subsuelo, y en el caso que nos ocupa, de los recursos de hidrocarburos de petróleo y gas. Esta política debe integrar al país en defensa de nuestra principal riqueza; es una política que sin lugar a dudas incumbe a todos los venezolanos, y no debería haber diferencias en torno a ella.
Por otra parte, el manejo de la actividad petrolera debe ser popular, porque tiene que estar orientada por los intereses populares y debe propiciar la participación de la clase obrera para lograr una máxima conexión con el pueblo. Para desarrollarla tenemos que descansar sobre los hombros del pueblo.
El pueblo tiene que ser un actor fundamental en todos sus estamentos, no solamente por intermedio de la representación del Estado venezolano, sino por intermedio de sus trabajadores y comunidades.
– Consolidar el despliegue de la infraestructura educativa del país, en los centros universitarios, técnicos, medios y ocupacionales para la formación para el trabajo liberador, así como la asociación directa de infraestructura de formación e innovación al parque productivo, tanto directamente en las unidades de producción como en los parques industriales, creados en la estrategia de transición del tejido productivo.
Tras una jornada histórica, en la que según datos del Consejo Nacional Electoral de Venezuela, se logró un resultado de participación histórico con el 80.7% de asistencia, el candidato a reelección Hugo Chávez obtuvo 7 963 061 votos, para un 55,5 por ciento del sufragio, diez puntos por encima de Capriles Radonski (44,4% – 6 426 286 votos).
Los demás candidatos quedaron de la siguiente forma: Reina Sequera sacó 68.210 votos (0,47%); Luis Reyes tuvo 7.946 (0,05%); María Bolívar contabilizó 7.269 (0,05%) y Orlando Chirino obtuvo 3.996 (0,02%).
Proyección internacional
Desde el inicio de su gobierno, Chávez desplegó una política exterior muy activa, caracterizada por la participación en innumerables cumbres y visitas a buena parte de los países del mundo, siendo gran impulsor de la unidad latinoamericana a través del fomento de espacios integracionista como el ALBA, la UNASUR, el MERCOSUR o la CELAC.
La política exterior de Chávez, alejada de las aplicadas por los gobiernos de Acción Democrática y Copei, se centró en el establecimiento de relaciones respetuosas con todas las naciones, en el respeto a las ideologías políticas y a las instituciones y en la colaboración con las naciones más pobres o necesitadas. Tras su gestión gubernamental Venezuela mantiene relaciones comerciales con la mayoría de las naciones del mundo, siendo China, Rusia, India, Bielorrusia, Estados Unidos, México, Colombia, Cuba y los restantes miembros del MERCOSUR (Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay), sus principales socios comerciales.
El vínculo entre Chávez y Cuba se inició incluso antes de Chávez fuera electo presidente. La primera visita de Chávez a Cuba se produjo en diciembre de 1994 cuando en aquel entonces, el teniente coronel Hugo Rafael Chávez Frías, en un gesto de valentía, aceptó la invitación que desde Cuba le cursara el Historiador de la Ciudad, Eusebio Leal Spengler y a La Habana vino cargado de sueños y convicciones y, sobre todo, con el ansia de comenzar a construir lo que devino indestructible amistad a prueba de piruetas políticas.
Desde que puso sus pies en la losa del aeropuerto internacional José Martí, expresó:
«Yo no merezco este honor, aspiro a merecerlo algún día en los meses y en los años por venir.»
Durante su mandato presidencial, comprendido entre 1999 y 2013, año en que fallece, las relaciones entre Venezuela y Cuba fueron una prioridad para el gobierno de Chávez, las que se fortalecieron mediante la firma de varios acuerdos y convenios que ayudaron a establecer un puente bilateral entre las dos naciones.
Promotor de la integración latinoamericana
Chávez ha promovido la integración latinoamericana más que cualquier otro presidente venezolano en los últimos años, superando los proyectos de otros mandatarios pro-latinoamericanos. Políticas tales como la venta de petróleo en condiciones de pago preferenciales a través de mecanismos integracionistas como Petrocaribe, el impulso de programas de cooperación en naciones pobres como Haití[18] así como el fomento de espacios de integración como la CELAC o la UNASUR, le han valido ser considerado como uno de los líderes políticos de latinoamérica.
«Hasta cuándo vamos a ser nosotros la periferia atrasada, explotada y mancillada. Estamos poniendo aquí la piedra fundamental de la unidad, la independencia y el desarrollo Sudamericano. Vacilar sería perdernos (…) Yo estoy seguro que no nos van a descarrilar, estoy seguro que hay descarriladores de oficio que se la pasan todos los días pensando y actuando a ver cómo se arma una guerra entre nosotros, pues entre nosotros no habría guerra ni más conflictos, sino hermandad, paz, integración, unión, comprensión de los problemas de cada uno, de cada país.» Hugo Chávez
Inauguración I Cumbre de la CELAC, 2 de diciembre de 2011
De conjunto con los expresidentes Luiz Inácio Lula da Silva de Brasil y Néstor Kirchner de Argentina, Chávez impulsó la derrota del Área de Libre Comercio para las Américas (ALCA) durante la Cumbre de las Américas celebrada en noviembre de 2005 en Mar del Plata así como ha apostado de la mano de los gobiernos izquierdistas de Rafael Correa, Evo Morales, Cristina Fernández y José Mujica el establecimiento de la UNASUR como la consumación del sueño de Bolívar, Sucre y San Martín de ver a Suramérica unida.
En abril de 2011 Chávez y el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos sirven como mediadores al retorno del ex presidente hondureño Manuel Zelaya, depuesto por un golpe de Estado militar en junio de 2009. En dicha mediación también se acordó el retorno de Honduras a la OEA.
Relaciones con África
Durante I Cumbre América del Sur – África, celebrada en Tripolí, Libia el 31 de agosto de 2009, Chávez al referirse a la integración entre ambas zonas expresó:
«Ambas forman parte del nuevo mapa geopolítico del mundo, un mundo que debe ser multipolar o no será mundo para nadie, basta de la unipolaridad y del imperialismo en nuestros pueblos (…) Creo firmemente que no habrá futuro para América Latina sin África, así como no habrá futuro para África sin América Latina»
Crisis de salud
El viernes 10 de junio es intervenido quirúrgicamente en La Habana donde se encontraba para la XI Comisión Intergubernamental de Cooperación Cuba-Venezuela. Según un comunicado oficial del gobierno venezolano al Presidente Chávez se le descubrió la existencia de un absceso pélvico que ameritó la decisión de Chávez de someterse de manera inmediata a un procedimiento quirúrgico correctivo.
Un comunicado dado a conocer al pueblo venezolano y a la comunidad internacional por el propio Presidente Hugo Chávez Frías el 30 de junio refiere que luego de esta operación, fueron apareciendo algunas sospechas de la presencia de otras formaciones celulares no detectadas hasta entonces.
«A lo largo de toda mi vida vine cometiendo uno de esos errores que bien pudiera caber perfectamente en aquella categoría a la que algún filósofo llamó “errores fundamentales”: descuidar la salud y, además, ser muy renuente a los chequeos y tratamientos médicos. Sin duda ¡qué error tan fundamental!, y sobre todo en un revolucionario con algunas modestas responsabilidades como las que la revolución me vino imponiendo desde hace más de 30 años.
Sin embargo, ya en La Habana, cuando caía la tarde del miércoles 8 de junio, allí estábamos de nuevo con Fidel, con aquel gigante que ya superó todos los tiempos y todos los lugares. Seguramente no fue difícil para Fidel darse cuenta de algunos malestares, que, más allá de mi rodilla izquierda, yo había venido tratando de disimular desde varias semanas atrás. Me interrogó casi como un médico, me confesé casi como un paciente, y esa misma noche todo el inmenso avance médico que la Revolución Cubana ha logrado para su pueblo, y una buena parte del mundo, fue puesto a nuestra plena disposición, iniciándose un conjunto de exámenes, de diagnósticos.
Fue así como se detectó una extraña formación en la región pélvica que ameritó una intervención quirúrgica de emergencia ante el inminente riesgo de una infección generalizada. Eso fue el sábado 11 de junio, muy temprano en la mañana, algunas horas antes del anuncio que fue leído al país y al mundo, y que ha desatado tantas manifestaciones de solidaridad que no dejan de emocionarme a cada instante.
Luego de aquella operación, que en principio logró el drenaje del absceso, comenzó un tratamiento antibiótico intensivo con una positiva evolución, que trajo una notable mejoría. Sin embargo, y a pesar de la favorable evolución general, a lo largo del proceso de drenajes y de curas, fueron apareciendo algunas sospechas de la presencia de otras formaciones celulares no detectadas hasta entonces.
Comenzó, por tanto, y de inmediato, otra serie de estudios especiales citoquímicos, citológicos, microbiológicos y de anatomía patológica que confirmaron la existencia de un tumor abscesado con presencia de células cancerígenas, lo cual hizo necesaria la realización de una segunda intervención quirúrgica que permitió la extracción total de dicho tumor. Se trató de una intervención mayor, realizada sin complicaciones, tras la cual he continuado evolucionando satisfactoriamente, mientras recibo los tratamientos complementarios para combatir los diversos tipos de células encontradas y así continuar por el camino de mi plena recuperación.
«Mientras tanto, me he mantenido y me mantengo informado y al mando de las acciones del gobierno bolivariano, en comunicación permanente con el vicepresidente, compañero Elías Jaua y todo mi equipo de gobierno.»
Hugo Chávez, 30 de junio 2011
El 4 de julio regresa a Caracas tras estar varias semanas en Cuba a causa de una intervención quirúrgica, es recibido por el pueblo en un emotivo acto realizado en el Palacio Miraflores, el presidente venezolano le habla a sus seguidores desde el Balcón del Pueblo. El 5 de julio encabeza desde el Palacio de Miraflores los actos conmemorativos del Bicentenario y del Día de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana. El 8 de julio Chávez anunciaba la creación del Ministerio de la Juventud designando a Mari Pili Hernández ministra el mismo.
El 22 de febrero de 2012 Chávez informó que volvería a La Habana para operarse, tras detectarse una lesión de dos centímetros de diámetro en el mismo lugar en el que se le extrajo el tumor en junio del 2011 aunque precisó que el cáncer no se había diseminado y se encontraba libre de afectaciones.
«En el examen en La Habana se ha detectado una lesión en el mismo sitio donde fue extraído el tumor hace ya casi un año. Es una lesión pequeña, de cerca de 2 centímetros de diámetro, muy claramente visible, eso obliga a extraer esa lesión y eso obliga a una nueva intervención quirúrgica.
No estamos a estas alturas seguros, nadie lo puede decir científicamente hablando que esa nueva lesión sea maligna. Sin embargo, hay probabilidades altas de que lo sea porque está en el mismo lugar donde estaba el otro tumor grande.
Vamos a ir a La Habana, pero no como están diciendo por allí que salgo esta noche, que si me llevan porque estoy en las últimas. No, no, sin carreras, todo a su debido tiempo. Mañana voy a estar trabajando todo el día, firmando papeles, preparándome para el fin de semana.» Hugo Chávez, 22 de febrero de 2012
Chávez el 8 de diciembre de 2012 acompañado de Nicolás Maduro (a su derecha) y Diosdado Cabello (a su izquierda) anunciando una nueva intervención quirúrgica. Esta sería la última intervención televisiva del mandatario.
A través de una transmisión desde el Palacio Presidencial de Miraflores en Caracas, el 8 de diciembre de 2012, Hugo Chávez, anunció que tras una revisión médica exhaustiva debería someterse a una nueva intervención quirúrgica la cual se volvería a realizar en Cuba.
(…)por algunos otros síntomas decidimos, con el equipo médico, adelantar exámenes, adelantar una revisión, una nueva revisión exhaustiva, y bueno lamentablemente, así lo digo al país, en esa revisión exhaustiva surge la presencia, en la misma área afectada, de algunas células malignas nuevamente. Eso nos ha obligado a revisar, a revisar el diagnóstico, la evolución del tratamiento, a consultar expertos, y se ha decidido, es necesario; es absolutamente necesario, es absolutamente imprescindible someterme a una nueva intervención quirúrgica. Y eso debe ocurrir en los próximos días. Incluso les digo que los médicos recomendaban que fuese ayer, ayer; a más tardar ayer, o este fin de semana. Yo dije: No. No, en verdad yo solicité permiso para el tratamiento hiperbárico, se presenta esto y yo quiero ir allá, yo necesito ir a Venezuela.» Hugo Chávez, 8 de diciembre de 2012
Por unanimidad, y en sesión extraordinaria, los integrantes de la Asamblea Nacional lo autorizaron a ausentarse del país y viajar a Cuba, para someterse a intervención quirúrgica.
A las 1:30 de la mañana del 10, el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez, viajó a La Habana y el día 11 el ministro de Información y Comunicación, Ernesto Villegas, mantuvo informado a Venezuela y el mundo sobre el desarrollo del proceso operatorio a través de varios comunicados a lo largo de día. En cadena oficial, el vicepresidente ejecutivo Nicolás Maduro informó en horas de la noche del 11 de diciembre la culminación del proceso operatorio y el inicio del postoperatorio y recuperación:
«El comandante Chávez, se encuentra ya en su habitación, iniciando los tratamientos especiales que el equipo de médicos, de expertos con asesoría de diversos médicos y expertos de nuestro país, de Cuba y de otras partes del mundo han iniciado para la etapa post-operatoria. Esta etapa post-operatoria va a durar varios días (…)»
Cumplidas las 72 horas del postoperatorio el gobierno emitió un nuevo parte informativo sobre el proceso de recuperación:
«Cumplidas 72 horas de la operación, el parte médico indica que el paciente cumple satisfactoriamente con el protocolo postoperatorio, en el marco de la complejidad asociada a una intervención quirúrgica de la naturaleza y duración de la practicada al presidente Hugo Chávez. El sangramiento ocurrido en el transcurso de la intervención fue atendido en forma oportuna y el paciente ha respondido en forma favorable al tratamiento aplicado. La recuperación ha sido lenta pero progresiva, de su condición general y de sus condiciones vitales. El presidente Chávez se ha comunicado con sus familiares inmediatos y a través del ministro Jorge Arreaza le ha enviado un saludo a todo el pueblo venezolano.»
El 18 de diciembre, en un comunicado emitido por el gobierno se informó que a Chávez se le había diagnosticado una afección respiratoria:
«(…) La condición general del Comandante Presidente en este momento es de estabilidad, luego de que el día de ayer, lunes 17 de diciembre, le fuera diagnosticada una infección respiratoria, que el equipo médico procedió de inmediato a tratar y ha sido controlada. De acuerdo con el criterio de los facultativos, este tipo de dolencia es una de las secuelas que se presentan con mayor frecuencia en pacientes que han sido sometidos a cirugías complicadas, como la que fue sometido el Presidente Chávez el pasado 11 de diciembre.»
El 22 de diciembre, vía Twitter, la hija del presidente, María Gabriela Chávez responde a la campaña de rumores desplegada en torno a la salud de su padre. Pidió que cesen las mentiras sobre su supuesta muerte. «Respeto a la familia y sobre todo respeto a mi pueblo. ¡Basta de mentiras! Estamos junto a papá. VIVOS, luchando y recuperando la salud. Con Dios».
Durante la madrugada del 29 de diciembre llega a La Habana el vicepresidente Nicolás Maduro acompañado por la Procuradora General, Cilia Flores. El día 30 durante la noche y desde Cuba, el propio Maduro, da a conocer un nuevo comunicado sobre el estado de salud del presidente Hugo Chávez:
«(…) fuimos informados sobre nuevas complicaciones surgidas como consecuencia de infección respiratoria ya conocida; el día de ayer nos mantuvimos pendientes de la evolución de su situación y la respuesta a los tratamientos; nos reunimos varias veces con su equipo médico y con sus familiares más allegados. Hace unos minutos estuvimos con el presidente Chávez, nos saludamos, y él mismo se refirió a estas complicaciones (…) El Presidente nos dio instrucciones precisas para que al salir de la visita informásemos al pueblo sobre sus condiciones actual de salud.»
El presidente Hugo Chávez junto a sus dos hijas durante su recuperación en La Habana, el 14 de febrero de 2013
El 15 de febrero de 2013, el gobierno presentó las primeras fotografías del presidente venezolano tras su intervención quirúrgica y en medio de su proceso de recuperación en La Habana. El 18 de febrero de manera sorpresiva, Chávez regresa a Venezuela siendo ingresado de manera inmediata en el Hospital Militar Dr. Carlos Arvelo de Caracas. Vía Twitter el mandatario expresó:
» Hemos llegado de nuevo a la Patria venezolana. Gracias Dios mío!! Gracias Pueblo amado!! Aquí continuaremos el tratamiento.»
Fallecimiento y entierro
Nicolás Maduro, en cadena nacional de Radio y TV, acompañado de otros miembros del gobierno venezolano, anuncia el fallecimiento de Chávez:
«El 5 de marzo de 2013, a las 4:25 pm, según el parte oficial, fallece el presidente Hugo Chávez debido a las graves condiciones de salud que poseía tras su última operación quirúrgica. La noticia fue divulgada de forma oficial por el Vicepresidente de Venezuela Nicolás Maduro desde el Hospital Militar Dr. Carlos Arvelo donde se encontraba ingresado el mandatario venezolano desde mediados de febrero de 2013:
Queridos compatriotas que nos escuchan y nos ven en todo el territorio de la Patria y nuestros hermanos del mundo:
Hoy, 5 de marzo, luego de haber acudido a la reunión del Consejo de Ministros y de la Dirección Político Militar de la Revolución, nos dirigimos aquí a las instalaciones del Hospital Militar de Caracas para seguir la secuencia de la salud de nuestro Comandante Presidente, y en el momento en que nos encontrábamos recibiendo el parte, acompañando a sus hijas, a sus hermanos, a sus familiares, recibimos la información más dura y trágica que podamos trasmitir a nuestro pueblo:
A las 4:25 de la tarde de hoy, 5 de marzo, ha fallecido el Comandante Presidente Hugo Chávez Frías, luego de batallar duramente con una enfermedad, durante casi dos años, con el amor del pueblo, con las bendiciones de los pueblos y con la lealtad más absoluta de sus compañeros y compañeras de lucha y con el amor de todos sus familiares.
La Flor de los Cuatro Elementos, mausoleo donde descansan los restos del líder bolivariano Hugo Chávez en el Cuartel de la Montaña en Caracas, lugar en donde radica el Museo de la Revolución Bolivariana.
El 7 de marzo de 2013, Nicolás Maduro anunció que el cuerpo de Hugo Chávez sería embalsamado y expuesto en el Cuartel de la Montaña del 23 de Enero, antiguo Museo Histórico Militar, para que «el pueblo pueda verlo eternamente».»
«Para que quede abierto eternamente, para que el pueblo pueda tenerlo ahí, en su museo de la revolución, en una urna de cristal. Para que nuestro pueblo pueda tenerlo allí por siempre»
«Vamos a llevar en un principio los restos del Presidente hacia un lugar especial que se está terminando de construir, un lugar especial para que él repose mientras llegue el momento de dar otros pasos que el pueblo ha pedido. Ese lugar que el pidió que convirtiéramos en el museo de la revolución bolivariana es el Cuartel de la Montaña (antiguo Museo Histórico Militar) donde estuvo su comando para dirigir el 4 de febrero»
Sin embargo poco después el Ministro de Comunicaciones, Ernesto Villegas, anunció en su cuenta de Twitter que el cuerpo de Hugo Chávez no sería embalsamado debido a los problemas prácticos que presentaba este proceso.
Según Villegas la posibilidad de embalsamar y colocar en una urna de cristal al líder de la Revolución Bolivariana fue descartada, tras evaluación de expertos de la Federación Rusa.
Los científicos plantearon que para el procedimiento el cuerpo de Hugo Chávez debía ser trasladado entre siete y ocho meses al país euroasiático.
El 15 de marzo de 2013, luego de diez días ininterrumpidos de multitudinarios homenajes en la capilla ardiente instalada en la Academia Militar, el féretro del líder de la revolución Bolivariana, fue trasladado al Cuartel de la Montaña, desde donde se gestara la rebelión cívico-militar del 4 de febrero de 1992, génesis de la Revolución Bolivariana.
La bóveda al aire donde reposan los restos mortales de Chávez, es un sarcófago pétreo como parte de una obra escultórica y fue sembrado en la Flor de los Cuatro Elementos, una estructura de granito creada por el arquitecto Fruto Vivas, y levantada en un salón del Cuartel de la Montaña o 4 de Febrero.