Empresas israelí y británica avanzan en la explotación del petróleo en Malvinas
La empresa israelí Navitas Petroleum, en asociación con la británica Rockhopper Exploration, lidera el proyecto León Marino (Sea Lion) en las Islas Malvinas, además de invertir en el territorio continental patagónico.
CAPAC – fuentes Anred y El destape
La empresa israelí Navitas Petroleum, en asociación con la británica Rockhopper Exploration, lidera el proyecto León Marino (Sea Lion). El proyecto de explotación petrolera en las Islas Malvinas está a punto de alcanzar una etapa crucial, con la confirmación de nuevos recursos y un ambicioso plan de desarrollo.
Según el reciente informe independiente de recursos mencionado en la Revista Petroquímica, el proyecto León Marino (Sea Lion) alcanzará un pico de producción de 150.000 barriles diarios, consolidando la explotación de hidrocarburos en el área ocupada por el Reino Unido.
Según estimaciones de Rockhopper y Navitas, con un barril de crudo cotizando a nivel internacional en torno a los 70 dólares, León Marino podría tener retornos anuales de alrededor de US$ 1.700 millones. De no frenarse por reclamos de la Argentina, León Marino tendrá 22 pozos perforados y puestos en producción. Un buque procesaría y almacenaría el crudo en alta mar y otros buques cargarían el petróleo y se lo llevarían a distintos mercados mundiales.
El yacimiento offshore León Marino fue descubierto en 2010 por Rockhopper. Desde entonces, se asoció con Harbour Energy, que en 2022 le vendió su participación a Navitas. Harbour Energy exploró petróleo en las Malvinas y en 2021 el gobierno argentino le había iniciado un proceso de sanción.
En agosto del 2024, en una transacción de US$ 11.200 millones, Harbour Energy adquirió los activos a nivel mundial de la alemana Wintershall DEA (cuyo principal accionista es la petroquímica BASF), que también tenía operaciones en la Argentina. De este modo, la británica se quedó con los activos de la alemana en Vaca Muerta y en offshore frente a Tierra del Fuego.