Cuba requiere diversificar el acceso a financiamientos externos
El acceso a financiamientos externos adquiere hoy mayor relevancia en naciones de menor desarrollo relativo, para completar las insuficiencias de ahorro interno, una necesidad que también toca a Cuba según afirmó una experta.
CAPAC – por Teyuné Díaz Díaz
En entrevista con Prensa Latina la directora del Centro de Investigaciones de la Economía Internacional (CIEI) de la Universidad de La Habana, Carola Salas, explicó que la isla requiere obtener esos capitales en los mercados financieros, algo complejo pues el país no es miembro de ninguna de las instituciones internacionales dedicadas a ello.
El Banco Mundial, ejemplificó, tiene un conjunto de cinco agencias especializadas en temas de financiamiento, pero como Cuba no puede formar parte de esos organismos le resulta más difícil obtener capitales de esas fuentes. Sin embargo, existen opciones vinculadas a entes bancarios regionales, la nación es miembro del Banco Centroamericano, mas incluso así es necesario diversificar las maneras de obtener recursos financieros, amplió la también Doctora en Ciencias Económicas.
Actualmente el país accede, básicamente, a proveedores comerciales y en ese caso se concreta por excelencia la mala calidad y el alto costo del financiamiento que recibimos, indicó.
En opinión de Salas, la isla debe adoptar decisiones de política económica para lograr inversiones más atractivas en medio de un contexto complejo, de bajo crecimiento y de reforzamiento del bloqueo financiero, económico y comercial impuesto por Estados Unidos.
Esa situación dispara el riesgo país y actualmente estamos en el límite, de llegar a una categoría inferior las agencias especializadas proponen la no inversión debido al peligro de colocar capitales en una nación con probabilidades de impago, detalló la investigadora.
Por lo tanto, debe existir una política priorizada para honrar los compromisos internacionales y para ello es necesario crear un fondo destinado a pagar la deuda externa, subrayó.
Si no pagas deudas no recibes préstamos, y de recibirlos sería en condiciones más onerosas, entonces no habrá crecimiento, y sin ello la posibilidad de impago es mayor. Se trata de un círculo vicioso en términos de endeudamiento, tal como sucedió en la década de los 80 en América Latina, explicó.
Ese riesgo, destacó, no lo podemos correr nuevamente, hay que pagar para crecer, porque no se puede crecer sin financiamiento internacional y para su acceso hay que cumplir una serie de parámetros desde el punto de vista de la credibilidad financiera del país.
En estos momentos estamos en una compleja situación, otra vez, con impagos sobre deudas renegociadas, eso nos resta oportunidades para la entrada de capitales internacionales, de flujos financieros, de la inversión extranjera en la calidad y cantidad que el país requiere, resumió la Profesora Titular de la Universidad de La Habana.
RECOMENDACIONES
Cuba requiere diseñar una estrategia de política económica que la convierta en un destino atractivo al inversor, consideró la experta.
En ese sentido, remarcó la importancia de conducir la inversión extranjera por caminos más diversos, con acceso a financiamientos de diferentes magnitudes –sean pequeños o medianos-, sin descartar el gran capital para los proyectos centralizados estatales.
También existen oportunidades derivadas de los nuevos actores económicos como las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), mediante las posibilidades de establecer vínculos directos con el capital internacional.
Ello, sin dudas, podría dinamizar la entrada de los flujos de capitales y, aunque sea en pequeños montos, mover la economía interna e incluso relacionar las inversiones extranjeras con las exportaciones.
Toda esa dinámica, apuntó, precisa de un entorno transparente, de políticas económicas bien diseñadas, proactivas, de encadenamientos entre los actores económicos internos, unido a la propuesta que podemos tener para el capital internacional.
En un contexto de bloqueo económico estadounidense muy fuerte es posible encontrar las potencialidades existentes si contamos con una política bien diseñada, articulada y atractiva, pues los inversores corren muchos riesgos en la isla, afirmó.
Es una asignatura pendiente establecer una política que convierta a Cuba en un destino atractivo para los inversores y el financiamiento internacional, a pesar de la compleja situación externa, de los agentes económicos externos y del cerco de Washington, concluyó.