Estados Unidos pone nuevas restricciones a los viajes hacia Cuba
Una nueva restricción a los viajes entre Estados Unidos y Cuba impuso el Gobierno norteamericano con el anuncio del Departamento de Transporte de ese país, este jueves, sobre la reducción del número de vuelos chárter a la Isla.
CAPAC- Tomado de Resumen Latinoamericano Cuba/ Foto: Evan Vucci / AP.
En respuesta a una solicitud efectuada el pasado mes de enero por el secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, la agencia gubernamental redujo la cifra de chárter a 3.600 viajes por año, lo cual afecta directamente a las familias cubanas a ambos lados del estrecho de la Florida, que ya han visto dramáticamente disminuidas las posibilidades de transporte.
Ello se debe a que en octubre de 2019 Washington prohibió los vuelos regulares desde territorio estadounidense hacia los aeropuertos cubanos, con excepción de la terminal internacional José Martí, de La Habana. Además, a inicios de 2020 el Departamento de Transporte limitó la posibilidad de fletar vuelos a otras ciudades de la nación caribeña fuera de la capital.
La nueva disposición de ese Departamento, divulgada este 28 de mayo, contempla que alrededor de 3 250 vuelos chárter de los 3 600 autorizados, estarán a cargo de las compañías aéreas Swift Air LLC y World Atlantic Airlines, hasta el 31 de mayo de 2021.
El pasado mes de enero Mike Pompeo solicitó, a través de un comunicado, el recorte de los vuelos chárter a Cuba, bajo el criterio de que ello restringiría aún más “la capacidad del régimen cubano de obtener ingresos, que usa para financiar su represión contra el pueblo cubano y su apoyo desmesurado al dictador Nicolás Maduro en Venezuela”.
Entonces, el ministro de Relaciones Exteriores de la nación caribeña, Bruno Rodríguez, rechazó enérgicamente la nueva acción del Gobierno de Estados Unidos, y la catalogó como una grave violación de los derechos humanos, de la libertad de viajar de los estadounidenses y como un obstáculo a la reunificación de las familias cubanas.
Es precisamente el pueblo el principal afectado por esta decisión, que se suma a otras de la administración Trump para dificultar la vida del país antillano. Entre ellas se cuentan la prohibición del arribo de cruceros turísticos, la persecución de las embarcaciones que trasladan combustible hacia Cuba, y la limitación para el envío de remesas que mandan los cubanoamericanos a sus parientes, entre otras.