Fármaco cubano contra el Coronavirus
Exitoso uso de Interferón alfa 2B recombinante (IFNrec) en el tratamiento a los enfermos de coronavirus, la nueva epidemia que crece a nivel global y preocupa a toda la comunidad internacional.
CAPAC – Anabella Almonacid Fernández
El virus llegó en un momento del año clave para la economía China, luego de firmar un acuerdo comercial con Estados Unidos y en plenas celebraciones del Año Nuevo Lunar. En principio contó con todas las condiciones para propagarse de forma indiscriminada hasta que el Gobierno chino ordenó poner en cuarentena, primero, a la ciudad de Wuhan en donde se originó el virus y, luego, a todo el país.
China es una de las naciones más pobladas de Asia Oriental. Tiene más de 1.400 millones de habitantes. Su capital, Pekín, ya fue afectada en 2003 por un virus conocido como SARS (síndrome respiratorio agudo y grave, en su traducción al español), que duró ocho meses y provocó una fuerte caída en el crecimiento económico en sólo un trimestre. El actual coronavirus es un 80 por ciento similar al SARS. Una versión más resistente de la epidemia que contagió a 8.098 personas y mató a otras 774, hace 17 años.
Después de analizar los efectos del virus sobre el cuerpo humano, las autoridades médicas chinas decidieron utilizar el fármaco cubano porque descubrieron que el virus disminuye la producción natural de interferón en el organismo humano y el IFNrec es capaz de suplir dicha deficiencia, fortaleciendo el sistema inmunológico de los pacientes aquejados por la contagiosa dolencia respiratoria que el mismo ocasiona.
Aunque China es el epicentro del brote y el país más afectado, el coronavirus se extendió a otros países del sureste asiático, se detectaron 322 casos en Italia y 10 fallecidos, un caso positivo en Brasil y el Gobierno chileno anunció 260 personas en aislamiento por precaución. Los signos de la infección incluyen síntomas respiratorios, fiebre, tos y dificultades para respirar. En casos más graves, puede causar neumonía, síndrome respiratorio agudo severo, insuficiencia renal e, incluso, la muerte.
El mundo «simplemente no está listo» para lidiar con la expansión de la epidemia del nuevo coronavirus, afirmó Bruce Aylward, jefe del equipo de expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), a su regreso de la misión realizada en China. Los últimos datos indican que el virus continúa expandiéndose a escala planetaria; en los más de 30 entre países y regiones directamente golpeadas, el contagio superó los 80 mil casos confirmados, de los cuales 77.658 están concentrados sólo en China.
El coronavirus representa «un golpe a la economía china», reflexionó la analista internacional Stella Calloni y cuestionó la forma en que la información del virus circulo entre los medios de comunicación mundial: «Parecería que China es un foco infeccioso que puede atentar contra el mundo. Hemos tenido situaciones similares en guerras biológicas». Es decir, el uso de microorganismos y substancias derivadas de estos con fines bélicos. Cuando estos organismos son utilizados de forma criminal y clandestina contra la población se considera un acto bioterrorista.
«Nos vemos en la obligación de analizar cada cosa que sucede. Todo aquello que genera el caos. Hoy tenemos a China aislada del mundo», concluyó la periodista argentina haciendo un llamado a la reflexión por las situaciones de racismo que se han denunciado en diferentes países.