Neuquén: Casa de la Amistad Argentino Cubana recibe donación de material histórico de solidaridad con Cuba
El Sindicato de Trabajadores Judiciales de Neuquén (SEJUN) donó a la Casa de la Amistad Argentino-Cubana de Neuquén copias digitales de un registro histórico, del año 1993, de solidaridad de los trabajadores con la Revolución Cubana.
CAPAC – por Leonardo Del Grosso
El lunes 21 de febrero el Sindicato de Empleados Judiciales de Neuquén (SEJUN) donó a la Casa de la Amistad Argentino-Cubana de Neuquén copias digitales de un registro histórico de video de la «Embajada de trabajadores judiciales argentinos en solidaridad con Cuba – Desfile del 1° de mayo de 1993», registro obtenido a partir de un videocassette VHS ofrendado al SEJUN por Julio Bertomeu, histórico dirigente de la Asociación Judicial Bonaerense y de la Federación Judicial Argentina.
En un emotivo encuentro, con la presencia de Silvia Pérez, Laura Goytisolo y Domingo Richter, de la Casa de la Amistad Argentino-Cubana de Neuquén, Edgardo Chervabaz, secretario general del SEJUN, acompañado por Héctor Andrés, Cristina Basone y Hugo Díaz, miembros de la secretariado general del SEJUN, hizo entrega del valioso material histórico, como testimonio de la estrecha relación del movimiento de los judiciales argentinos con la Revolución Cubana, singular expresión de soberanía, justicia social y lucha antiimperialista.
Esta cita fue una buena ocasión para compartir las experiencias que varios de los presentes tuvieron en relación con Cuba, su pueblo y su revolución. Los ejemplos de la calidez, la alegría y la conciencia antiimperialista y humanista de los cubanos se fueron manifestando en cada uno de los testimonios que en una amena conversación se fueron escuchando.
Silvia Pérez manifestó que «nosotros a partir de haber participado en una de esas brigadas quedamos comprometidas. Siempre habíamos sido admiradoras de Cuba pero eso nos comprometió mucho más».
Silvia se refiere a las brigadas de solidaridad que desde diferentes países se hacen hacia Cuba. Organizadas por el Instituto Cubano de Solidaridad con los Pueblos, en las brigadas se realiza trabajo voluntario en el campo o en fábricas, se participa de actividades políticas y culturales y, lo fundamental, se conoce íntimamente al pueblo de Cuba, en su resistencia contra el asedio de Estados Unidos, en su resistencia contra el bloqueo, en su vivir sencillo y generoso.
Laura Goytisolo, por su parte, afirmó que «yo fui como brigadista y me enamoré del pueblo cubano y los voy a defender, y los voy a acompañar».
En todos los relatos está presente la lucha denodada de todo el pueblo, con sus organizaciones de todo tipo, dirigido por el Partido Comunista de Cuba, contra el bloqueo norteamericano, verdadero acto genocida que, como lo manifestó Laura, buscar «rendir por hambre», a un pueblo que jamás se rendirá y es ejemplo de resistencia.
«El Cherba», que es como le dicen familiarmente en Neuquén al actual secretario general del SEJUN, contó también varias anécdotas de su experiencia cuando viajó a Cuba, en la década de los 90 del siglo pasado, destacando la hospitalidad y calidez de los cubanos, que lo recibieron como uno de los suyos, abrigándolo en la calidez de la familia cubana.
Y justamente por esos años difíciles una embajada de trabajadores judiciales argentinos fue a la celebración del 1° de mayo, en 1993, que es lo que refleja el contenido digital donado a la Casa de la Amistad Argentino-Cubana de Neuquén. Esos fueron tiempos especialmente muy duros para Cuba: hacía dos años que la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas había dejado de existir, de la misma forma que el «bloque de países del Este», lo que trajo como consecuencia que muchos socios económicos de Cuba (que no lo eran en los injustos términos del intercambio capitalista) dejaron de ser socios de un día para otro, impactando así de manera dramática en la complementación internacional de la economía cubana, porque Cuba sufre desde 1962 el feroz bloqueo de los Estados Unidos.
El peronista neuquino Jorge Izquierdo, histórico dirigente sindical recientemente fallecido, fue quien hizo uso de la palabra, el 2 de mayo de 1993, en representación de los judiciales de todo el país en el Congreso de Trabajadores «Defendamos la esperanza – No al bloqueo», realizado en Cuba con las delegaciones de más de 50 países.
«Los trabajadores judiciales argentinos -expresaba Jorge Izquierdo- venimos a manifestar el grado de satisfacción, alegría, por la demostración de dignidad del pueblo cubano que ha optado por morir de pie antes que vivir de rodillas y que es un derrotero que ninguno de los trabajadores del mundo puede dejar de reivindicar para conseguir realmente un proceso transformador donde la justicia social sea el meridiano para todos los desposeídos del mundo».
Izquierdo, que había sido el primer secretario general de la CGT regional reunificada luego de la dictadura militar, que había sido secretario general del SEJUN y que, en ese 1993, era secretario gremial de la FJA, continuaba expresando en su discurso (refiriéndose al gobierno cipayo de Menem):
«Nosotros tenemos que hacer un mea culpa: los argentinos tenemos un gobierno que no representa en relación al pueblo cubano la solidaridad que el pueblo argentino siente. No podemos desconocer bajo ningún punto de vista la solidaridad del pueblo cubano con Argentina cuando enfrentamos a la alianza anglo-norteamericana en la invasión de las Islas Malvinas que seguimos reivindicando como propiedad inalienable de toda la República Argentina y de América Latina y allí supimos de la ferocidad del Imperio, y allí supimos lo que es enfrentar a un enemigo tan poderoso. Por eso les transmitimos nuestra enorme solidaridad, les transmitimos nuestro formal compromiso desde los trabajadores judiciales argentinos y también, porque no, del Congreso de los Trabajadores Argentinos que hemos inaugurado, allá por el mes de noviembre, con la palabra y la presencia del compañero Bernal que tiene una participación protagónica, donde en la Argentina estamos tratando de fomentar un nuevo modelo sindical autónomo y pluralista para dar verdadera respuesta a los trabajadores argentinos como le ha dado el pueblo en el poder, al pueblo cubano, con justicia social, con educación, con vivienda y con salud pública, valores que no tienen precio y nosotros sabemos lo que es tener 17 millones de argentinos, sobre 35, viviendo bajo los límites de la pobreza en un país productor de alimentos».
Por último, para despedirse, Izquierdo decía, aludiendo a la gran manifestación del 1° de mayo: «Compañeros de Cuba, traemos la solidaridad de una gran parte del pueblo argentino y nos vamos orgullosos de haber compartido la fiesta de la dignidad del pueblo cubano. Nada más».
En esta crónica transmitimos extensamente estas palabras de Izquierdo porque tienen una gran actualidad, además de su emotividad, y un gran valor político como expresión de la solidaridad del movimiento de los trabajadores argentinos con la Revolución Cubana.
«Compañeros de Cuba, traemos la solidaridad de una gran parte del pueblo argentino y nos vamos orgullosos de haber compartido la fiesta de la dignidad del pueblo cubano»
Jorge Izquierdo
Ese 1° de mayo de 1993 una imponente movilización popular colmó la Plaza de la Revolución en La Habana, donde se hizo el acto central del Día Internacional de los Trabajadores con la presencia multitudinaria del pueblo cubano y de delegaciones de decenas de países del mundo, acto que fue presidido por el Comandante en Jefe de la Revolución Cubana, Fidel Castro, y por el Secretario General de la Central de Trabajadores de Cuba, Pedro Ross Leal. Y allí estuvieron los trabajadores judiciales argentinos, con un numeroso contingente de compañeros de todo nuestro país.
Hoy, a casi 30 años de aquellos días, los trabajadores judiciales de Neuquén comparten con la Casa de la Amistad Argentino-Cubana de Neuquén los registros de esos acontecimientos. La Casa de la Amistad Argentino-Cubana de Neuquén se ve fortalecida por este importante gesto, en momentos en que los pueblos de Nuestra América necesitamos unirnos en la resistencia contra los que pretenden arrebatarnos los sueños.
Desde el pasado llegan las voces de los que nos precedieron, para alentarnos, en la lucha de este presente, a asegurar el futuro digno que todo el pueblo merece.