Venezuela: Bloqueo económico y economía política de la recuperación productiva
Expone Jesús Faria en éste artículo las características del bloqueo que sufre Venezuela, sus consecuencias y los esfuerzos y planes del gobierno para construir un nuevo modelo productivo para activar la producción nacional y la economía venezolana
CAPAC – Por Jesús Faría (*)
El Bloqueo imperialista y sus consecuencias
1. El bloqueo económico representa un crimen a gran escala contra nuestro pueblo, que ha afectado a toda la economía, especialmente, a la industria petrolera, corazón productivo del país.
2. Sus consecuencias sociales han sido desastrosas: desplome de los salarios, deterioro del empleo, aumento de la pobreza, restricciones financieras para atender la seguridad social, la educación, la salud, la alimentación y los servicios públicos…
Recuperación productiva, inversión y la empresa privada
3. Con las grandes victorias políticas, militares y diplomáticas alcanzadas por las fuerzas revolucionarias, se crean condiciones para que el Estado y la revolución concentren todas sus fuerzas en la recuperación de la economía.
4. La estrategia para ello se basa en la activación de la inversión y, con ello, la expansión productiva. El crecimiento económico nos permite crear empleo, aumentar sostenida y sustancialmente los salarios reales, disponer de recursos para invertir en los servicios públicos y en toda el área social.
5. En condiciones normales, los ingresos para la inversión nacional provenían esencialmente del sector petrolero. Sin embargo, como hemos mencionado, esta situación ha cambiado dramáticamente por el bloqueo. Ello exige concentrar la estrategia de promoción de la inversión en el sector privado.
6. Esta relación entre el Estado y el capital privado no nos debe extrañar. Estamos en una economía mixta dirigida por el Estado nacional, tal como lo establece la Constitución y el Plan de la Patria del comandante Chávez. Ha existido a lo largo de toda nuestra revolución y vamos a convivir por mucho tiempo con el capital privado.
La economía política de la recuperación productiva
7. Por cierto, otras revoluciones socialistas en otros momentos han desarrollado modelos económicos que contemplan y estimulan la participación del sector privado nacional y extranjero. Ocurrió a comienzos de la revolución bolchevique con Lenin al frente en el marco de la NEP; con la política de Apertura y Modernización en China en los 70 bajo la conducción del Partido Comunista de China; con la estrategia de Renovación aplicada en Vietnam en los 80 bajo la dirección de los comunistas vietnamitas; en todos estos casos con gran éxito. En Cuba, en estos momentos, se encuentra en marcha el proceso de Actualización de la economía impulsada por los comunistas de ese país.
8. Lo que llamamos la economía política del poder nos señala claramente la necesidad histórica de este rumbo económico. Por una parte, el poder del Estado y de la fuerza revolucionaria, que lo dirigen con el apoyo ampliamente mayoritario de los trabajadores venezolanos, garantizarán que este desarrollo económico se transforme en bienestar para el pueblo, en fortaleza para la independencia nacional, en desarrollo integral de la nación.
9. Entre tanto, dicho desarrollo es una base indispensable para fortalecer la revolución, para generar condiciones que garanticen la continuidad de nuestro proyecto histórico. Además, en el mediano plazo la transición al socialismo requiere de una base material sólida y altamente productiva.
El nuevo modelo productivo
10. Estas inversiones no llegarán espontáneamente. Se requiere estabilidad política, seguridad jurídica, un clima de confianza, estímulos económicos.
11. Como lo han demostrado China y Vietnam, estas condiciones no significan en ningún momento la entrega del país al control de las corporaciones ni la instauración de un régimen neoliberal.
12. El Estado está llamado a jugar un rol estelar en términos de planificación, coherencia de sus políticas económicas, eficiencia en la lucha contra las corruptelas y el burocratismo, en el mecanismo para direccionar los recursos hacia las actividades priorizadas para la diversificación y modernización productiva. Con la recuperación petrolera nacional se podrá restablecer buena parte de la fortaleza económica estatal. El Estado está llamado a jugar un rol vital en el mecanismo de regulación socialista de mercado.
13. La economía debe abrirse a la captación de las potencialidades que se desprenden del desarrollo de la economía mundial. No se trata de una apertura indiscriminada, sino de captar los beneficios de esta dinámica mundial. Asimismo, es esencial la búsqueda de mecanismos efectivos de integración en la región y con nuestros principales aliados.
14. Las políticas económicas deben apuntar fundamentalmente a la reactivación productiva y a los equilibrios básicos de la económica. Especial relevancia reviste la reducción de la inflación. En ese esfuerzo se debe mantener y fortalecer el carácter integral de la estrategia económica, afinar permanentemente los instrumentos de política económica.
Revolución bolivariana y perspectivas de la recuperación económica
15. En estos momentos nos encontramos en buenas condiciones para la recuperación: estabilidad política, voluntad política del Estado, aprendizaje acumulado para evadir el bloqueo, apoyo inmensamente mayoritario de la clase obrera… Una victoria revolucionaria el próximo 21 de noviembre es de enorme importancia para consolidar este escenario.
16. Se activan tendencias y procesos que apuntan claramente a la recuperación productiva: se estabiliza la reactivación petrolera, se mantiene el movimiento productivo ascendente de un importante sector de la economía privada, aumenta el protagonismo de los trabajadores en la reactivación de empresas básicas, el gobierno exhibe una mayor eficiencia en el combate contra el bloqueo…
17. La recuperación de la economía nacional constituye la base para el mejoramiento sustancial de las condiciones de vida de nuestro pueblo, especialmente, el incremento salarial y, a su vez, representa una grave derrota a la política de agresión imperialista.
18. Esto llevará a la contrarrevolución a activar todos sus mecanismos desestabilizadores para impedirlo, a lo que se unen los ataques ultraizquierdistas.
19. En este esfuerzo reactivador de la producción nacional, los grandes desafíos a superar son la intensidad criminal del bloqueo económico y las deficiencias administrativas y de funcionamiento del Estado.
20. Finalmente, la contradicción fundamental de la revolución bolivariana en la actualidad se desprende de la defensa de la patria frente a la agresión imperialista. Esto implica la impostergable construcción de un gran bloque histórico por la defensa de la independencia, lo cual pasa necesariamente por la recuperación productiva. En los actuales momentos, producir es sinónimo de revolución
(*) Jesús Faria es Presidente de la Comision de Finanzas y Desarrollo Económico de la Asamblea Nacional de la República Bolivariana de Venezuela y Miembro de la Dirección Nacional del PSUV