Medio Oriente: espectacular viraje de los Emiratos Árabes Unidos
Irán y los EAU han firmado un acuerdo para reforzar la cooperación de la seguridad en su frontera marítima común, lo que es un viraje de la posición de los EAU con respecto a su postura anterior y un alejamiento respecto de la política de Trump hacia Irán.
por Yusuf Fernández. Tomado de Al Manar en castellano
El documento fue firmado por el jefe de la Guardia Fronteriza de Irán, general Qassem Rezaie, y el jefe de la Guardia Costera Emiratí, general Mohammad Ali Mosleh al Ahbadi, durante un encuentro en Teherán el jueves.
Esta firma tuvo lugar después de que responsables de Irán y los EAU se reunieran por primera vez en seis años en la capital iraní para discutir vías para robustecer la seguridad marítima.
Después de la sesión, Rezaie dijo que el documento fue firmado en línea con los esfuerzos para impulsar la cooperación fronteriza y la interacción entre los dos países.
Agregó que las reuniones periódicas entre funcionarios de los dos países podrían ayudar a aumentar aún más la interacción fronteriza, facilitar el trabajo de los empresarios y pescadores de los dos países y combatir los intentos dirigidos a alterar la seguridad marítima.
Al Ahbabi, por su parte, describió el memorando como un “paso positivo” que puede servir a los intereses de ambas naciones en la región, reforzar la seguridad fronteriza y facilitar el control y el paso fronterizos.
Esta firma supone, sobre todo, un golpe para los intentos de EEUU de crear una coalición anti-iraní en el Golfo Pérsico, ya que muestra que los propios países de la región pueden cooperar y reforzar la seguridad gracias a su cooperación mutua.
El 15 de Junio, el ministro de Exteriores de los EAU, Sheij Abdulá bin Zayed al Nahyan, señaló que su país no tenía pruebas para culpar a otro de los ataques ocurridos en mayo en el puerto de Fuyairah, que afectaron a cuatro barcos.
Esta firma del memorando se produce además en un momento en el que los EAU han decidido retirarse de la guerra de Yemen y han buscado la ayuda iraní para facilitar este proceso.
Rechazo a las injerencias externas
Por su parte, Rezaei dijo que el Golfo Pérsico y el Mar de Omán pertenece a los países de la región.
“No debemos permitir que otros países dañen la seguridad regional. Debemos oponernos a sus intentos de desestabilizar la zona y buscar sus propios intereses egoístas en esta región. Debemos gestionar nuestras fronteras comunes y establecer la seguridad en ellas de manera conjunta a través de la cooperación interfronteriza”.
jefe de la Guardia Fronteriza de Irán, general Qassem Rezaie
Por su parte, el responsable emiratí dijo que la intervención de ciertos gobiernos en la región era “una causa de problemas” para esta.
Él coincidió con el funcionario iraní en que son los países regionales los que deben garantizar la seguridad en el Golfo Pérsico y el Mar de Omán. También alabó los esfuerzos de Irán en la lucha contra el narcotráfico en la región.
Pacto de no agresión
Como parte de los esfuerzos de Irán de fortalecer la cooperación entre los países regionales, en el mes de mayo, Teherán propuso la firma de “un pacto de no agresión” entre los países de la región, que prohibiría a estos actuar los unos contra los otros. Rusia y Qatar recibieron de buen grado esta propuesta en junio y Kuwait pareció también interesado en la misma. Según el periódico Al Rai, el embajador iraní en Kuwait, Mohammad Irani, afirmó haber recibido una respuesta positiva de parte de “varias partes regionales” en relación a la firma del pacto y añadió que las respuestas no se limitaban solo a Kuwait.
De este modo, frente a los llamamientos incesantes de la administración Trump para crear una coalición militar en el Golfo Pérsico, las reticencias de los países de la región son muy claras. Kuwait manifestó en respuesta a la demanda de Washington que la situación de la región es muy distinta de la de la época de Saddam Hussein y añadió que no permitirá que su territorio sea utilizado contra Irán. Kuwait rechazó en este sentido una petición estadounidense para desplegar 4 bombarderos B-52 en su suelo.
Según el canal Al Mayadin, el cambio de postura emiratí supone el fracaso total de la estrategia de EEUU de buscar apoyos en los países regionales para una política de agresión contra Irán.
“La última reunión entre dos delegaciones de las guardias costeras de Irán y los EAU data de 2013. Desde entonces, EEUU ha creado constantemente tensiones en las aguas del Golfo Pérsico y los Emiratos le apoyó. Nadie podía imaginarse hace dos semanas que una reunión de este tipo podría tener lugar en Teherán. Después de todo, Abu Dhabi cruzó las líneas rojas al participar en la ofensiva saudí contra los aliados yemeníes de Teherán y mantener una postura de abierta hostilidad hacia Irán”.
Al Mayadin TV
Una consecuencia importante de la firma de este memorando es el aislamiento en que deja a Arabia Saudí con respecto a su postura en la guerra de Yemen y a sus relaciones contra Irán. “La presencia de responsables emiratíes en Teherán y el anuncio de Abu Dhabi de abrir sus bancos a los iraníes, a pesar de las sanciones, han sido seguidos con horror por los saudíes que comienzan a darse cuenta de la fragilidad de sus alianzas. De ahí, sin duda, los recientes comentarios del representante saudí en las Naciones Unidas, que por primera vez anunció la disposición de Riad para reanudar las relaciones diplomáticas con Irán. Estos comentarios fueron seguidos por la liberación de un barco iraní inmovilizado en Yeddah. Este barco se había averiado en la costa saudí y después de dos meses y medio de atraque fue liberado”, señaló Al Mayadin. “Todo va mal en la estrategia de Trump. Sus peones comienzan a abandonarlo”.