India: lucha de agricultores cumplió 11 meses
Cientos de miles de campesinos llevan a cabo desde hace más de 11 meses una lucha pacífica, continua y decidida pese a las severas dificultades afrontadas durante este período, en lo que es considerado como las mayores protestas agrarias en todo el mundo.
CAPAC – tomado de Prensa Latina
Nueva Delhi, 31 oct (Prensa Latina) El movimiento de los agricultores de la India contra tres polémicas leyes del sector que comenzó en noviembre del año pasado junto con una huelga de la clase obrera, matiza todavía hoy la palestra nacional.
Cientos de miles de campesinos llevan a cabo desde hace más de 11 meses una lucha pacífica, continua y decidida pese a las severas dificultades afrontadas durante este período, en lo que es considerado como las mayores protestas agrarias en todo el mundo.
Los agricultores de varios estados del muy poblado país surasiático exigen al gobierno del primer ministro Narendra Modi que proteja sus medios de vida del saqueo empresarial en los mercados no regulados.
También, los campesinos exigen al gabinete del derechista Bharatiya Janata Party (BJP), que traducido significa Partido Popular Indio, la derogación de las tres leyes aprobadas en septiembre de 2020 por el Parlamento para la agricultura.
Los protestantes catalogan de antiagrícolas, antipopulares y proempresariales a dichas nuevas legislaciones, las cuales afirman fueron impuestas de forma antidemocrática e inconstitucional, según recalcó el portal Peoples Democracy.
En cambio, los labriegos demandan la aprobación de una norma jurídica que garantice el Sistema de Precio Mínimo para todos los agricultores.
Los granjeros temen que esa tríada de disposiciones acaben con el sistema mediante el cual el Estado compra sus cosechas, dejándolos a merced de las grandes empresas.
Una decena de rondas de conversaciones con representantes del gobierno, que proyectó las nuevas leyes agrarias como importantes reformas, no consiguieron salir del punto muerto.
Como dijo el Samyukta Kisan Morcha (SKM), la coalición de más de 40 sindicatos agrarios que alimentan la protesta, «este movimiento se asemeja a la lucha por la independencia de la India contra sus gobernantes coloniales británicos y a la represión económica y política de la misma».
El gobierno encabezado por Modi se niega a conceder las legítimas reivindicaciones de los agricultores, que atañen a su vida y la de sus futuras generaciones.
Entre tanto, una reciente masacre ocurrida en la localidad de Lakhimpur Kheri el pasado 3 de octubre no hizo más que fortalecer y extender la protesta agraria.
Se organizaron manifestaciones en cientos de lugares de la India para exigir la inmediata detención y despido del ministro de Estado Ajay Mishra Teni, principal acusado por el atropello de varios campesinos por un vehículo asociado al gobierno en el incidente.
Como parte de la protesta «Rail Roko» para exigir la destitución y aprisionamiento de Mishra, los agricultores bloquearon el tráfico ferroviario en varios lugares del país.
El SKM pidió que esa acción se llevara a cabo de forma pacífica, sin ningún tipo de destrucción ni daño a la propiedad ferroviaria.
Cuatro de las ocho personas que perecieron en los referidos actos de violencia eran agricultores, al ser arrollados por un auto que transportaba a miembros del gubernamental BJP.
Los campesinos enfadados lincharon a algunas personas que iban en el vehículo y entre los muertos figuraron dos integrantes del BJP, su conductor y un periodista local.
Desde el suceso de Lakhimpur Kheri, en el cual murieron ocho personas, entre ellas cuatro campesinos, el SKM exige la destitución de Ajay Mishra del Consejo de Ministros, quien disparó además contra un agricultor.
«Mishra promovió el odio, la enemistad y la desarmonía comunal entre hindúes y sikhs en sus discursos», apuntó además una declaratoria de la coalición sindical campesina.