El proyecto OTAN para Gaza.
Mucho se debate sobre los objetivos específicos de los sucesos del 7 de octubre de 2023, en que las fuerzas de la resistencia palestina emergieron de su confinamiento en la Franja de Gaza, para enfrentarse a Israel.
CAPAC – Por Sebastián Salgado para Dataurgente.com
Mucho se debate sobre los objetivos específicos de los sucesos del 7 de octubre de 2023, en que las fuerzas de la resistencia palestina emergieron de su confinamiento en la Franja de Gaza, para enfrentarse a Israel. El mundo quedó atónito ante los acontecimientos, con imágenes que llegaban filtradas y seleccionadas a través de las redes sociales. Una fiesta de música electrónica, con sus bocinas apuntando a tímpanos árabes más allá de los muros, fue el telón de fondo para acusar de terrorista a Hamas por sus acciones.
En julio de 2006 un comando de Hezbolá en Líbano, secuestró dos soldados del régimen sionista para intercambiarlos por prisioneros en cárceles de Israel. Tal vez, una inspiración para las acciones de octubre, siendo miles los palestinos torturados y detenidos ilegalmente. Sin embargo, el ejército israelí abrió fuego desde helicópteros sin distinción de objetivos, sumando víctimas propias a la operación armada de la resistencia.
Desde entonces, un genocidio en HD recorre las pantallas del mundo, con bombardeos a hospitales y campos de refugiados. Niños descuartizados envueltos en mantas, son contenido “pochoclero” para las familias colonas blancas que bailan en Tel Aviv. Mientras, la falta de agua y alimentos, cierran el grifo de una pena de muerte sentenciada desde Washington y los gritos infantiles se silencian deshidratados bajo los escombros de lo que fueron viviendas.
La tormenta de Al Aqsa, sin embargo, se convirtió en un huracán de solidaridad para con el pueblo palestino. En cada capital del mundo, el rojo, blanco, negro y verde, caminan entre multitudes con puños apretados por las avenidas. Lo obvio se hizo evidente. El silencio cómplice del genocidio israelí, es una construcción mediática corporativa de censura mundial, sin base popular.
Más de 35.000 asesinatos en 5 meses, forman parte del proyecto sionista para la ocupación de Gaza, pero este genocidio tiene por objetivo un plan diseñado con anterioridad. La construcción del canal Ben Gurión, desde la ciudad de Eliat en Palestina ocupada, hasta el norte de la Franja de Gaza, será la “ruta de la seda judía”, para trasportar bienes desde el sudeste asiático hacia Europa.
Para garantizar ese proyecto occidental que busca quitarle poder económico a China, Estados Unidos establecerá una base de la OTAN, la más grande fuera de los países que actualmente son miembros plenos de esta organización belicista. La viabilidad del canal Ben Gurión y los yacimientos de Gas y Petróleo que Israel planea perforar, frente a las costas de Gaza, en Palestina, estarán asegurados a punta de cañón.
El plan de exterminio se complementa utilizando a Egipto como el gran león del circo israelí. En el noroeste del desierto del Sinaí, ya se han construido 30.000 viviendas con todos los servicios para recibir a la estampida humana que significará la apertura controlada de la puerta de Rafah, con más de medio millón de sobrevivientes que llegarán a la ciudad egipcia de Al- Arish, buscando escapar de los bombardeos.
La existencia misma del ente sionista, depende de las reacciones de los países de la región. El actual genocidio en Gaza, es la respuesta a la creciente resistencia en el mundo islámico contra el ocupante. La utilización de pañales como parte del uniforme israelí para los soldados que deben enfrentarse a las fuerzas de la resistencia, demuestran su incontinencia, propia de la cobardía de quienes solo están preparados para asesinar civiles.
Estas acciones, planificadas desde hace largo tiempo, no parecen ser el resultado de los hechos del pasado 7 de octubre. Si los ataques japoneses en Pearl Harbor, fueron la excusa de dos bombas atómicas contra Japón y la detonación controlada de las Torres Gemelas generó el silencio occidental contra el genocidio en Irak; La base de la OTAN en Gaza, será el preludio de la gran guerra de Asia Occidental.