En estos momentos ante la ofensiva anunciada abiertamente por republicanos y demócratas de Estados Unidos, incluyendo al Pentágono y el Comando Sur, ya no podemos refugiarnos en la defensiva, Todo lo contrario, hay que dar pasos gigantescos y registrar que ha comenzado un nuevo Orden Mundial

CAPAC – por Stella Calloni

Desde principios de los años dos mil habíamos logrado avanzar hacia un proyecto de integración emancipatorio, trabajando revolucionariamente por la unidad de América Latina, bajo el liderazgo del líder cubano Fidel Castro Ruz y el comandante Hugo Chávez Frías. A ellos se agregarían otros presidentes electos por primera vez por los pueblos, que a fines de los años 90 se habían alzado contra la imposición de un neoliberalismo sin anestesia, que comenzó con las dictaduras militares.

Son muy pocos los que recuerdan que esta insurrección antineoliberal que se multiplicó comenzó con el “caracazo”, el levantamiento del pueblo venezolano en febrero de 1989 y a partir de entonces se produjeron una serie de levantamientos, en una mayoría de los pueblos de Nuestra América, después de lo cual surgió una década de gobiernos populares. Estos nuevos gobiernos fueron elegidos por esos mismos pueblos que derrotaron al neoliberalismo rampante en las calles y carreteras de Nuestra América.

Mucho podemos hablar sobre estos sucesos, pero sólo se citan para marcar dos hitos, entre tantos otros, como fue lograr un profundo cambio político del Mercado Común del Sur, (Mercosur), nacido para un proyecto de integración a nivel económico y comercial integrado por cuatro países Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay para ser renacido en 2003 ante los nuevos gobiernos populares y especialmente dinamizados por el fuerte triángulo estratégico que conformaron Argentina, Brasil, y Venezuela. Otros países asociados eran: Chile, Colombia, Ecuador; Guyana, Perú, Surinam y Bolivia que se integraría como Estado parte.

Fueron los países del Mercosur que en la voz y un discurso extraordinario de Néstor Kirchner como anfitrión de la IV Cumbre de las Américas, ante el presidente de Estados Unidos George W Bush cuando dijo un contundente NO al Area para el Libre Comercio de las Américas (ALCA) proyecto colonial por excelencia. Bush regresó a su país con las manos vacías, humillado y derrotado cuando había llegado convencido de imponer el ALCA. Esto sucedió en noviembre de 2005

Luego el 23 se mayo de 2008 se crea la Unión de Naciones Suramericanas en Brasil (siete países Argentina, Brasil Bolivia, Colombia, Surinam Guyana y Venezuela). Pero lo sucedido en Caracas, Venezuela, en diciembre de 2011 cuando se puso en marcha la Comunidad de Naciones Latinoamericanas y Caribeñas (CELAC), que involucró a toda la región, con pluralidad y diversidad, era un paso. Tanto como la decisión de convertir a Nuestra América en un territorio de paz. No ha logrado el imperio acabar con la CELAC, a pesar de sus golpes de Estado duros y supuestamente “blandos”.

En estos momentos ante la ofensiva anunciada abiertamente por republicanos y demócratas de Estados Unidos, incluyendo al Pentágono y el Comando Sur, ya no podemos refugiarnos en la defensiva, Todo lo contrario, hay que dar pasos gigantescos y registrar que ha comenzado un nuevo Orden Mundial y que la dialéctica no es sólo una frase echada al viento en los textos marxistas.

Si hay un período en que debemos aplicarla con rigor, es en este siglo XXI donde se está definiendo el futuro de la humanidad en peligro de extinción.

También hay que conocer todo lo planeado por el imperio para esta atapa. Pocos hablan de las miles de muertes provocadas por la “guerra económica” el bloqueo medioeval, que en el caso cubano, se define con sanciones cada vez más crueles e inhumanas, llegando a extremos criminales como lo está haciendo en la actualidad para asfixiar lentamente a la población, lo que es una tortura aplicada sistemáticamente. La guerra económica, como la psicológica son armas de destrucción masiva.

Este 13 de agosto de 2023 día en que conmemoramos el natalicio del Comandante Fidel Castro, el bloqueo mediático alcanza a todo lo que llaman “occidente”, por las medidas aplicadas infructuosamente contra la Federación Rusa, a la que quieren borrar del mapa y dividir, para dominar mejor ese inmenso territorio, cuya invasión estaban preparando los países de la Organización del Atlántico Norte (OTAN)como se demostró en la frontera de Ucrania con Rusia.

El plan era que la OTAN convertida en gendarme del imperio en el mundo militarizara todo el espacio de la frontera de Ucrania, como un polvorín de guerra, a la vez que se preparaba una táctica de provocación, de acciones terroristas de falsa bandera y otras para justificar “la necesidad” de una intervención “democrática” o “humanitaria”.

Este es el verdadero origen del actual enfrentamiento bélico y de la toma del gobierno ucraniano, desde el golpe de 2014 por los renacidos nazis apoyados por el “occidente”, como en la vieja y vetusta “guerra fría.

En febrero de 2011, en un encuentro con la Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad, en el marco de la 20 Feria del Libro en La Habana, Fidel advertía que “entre los factores que amenazan al mundo están las guerras. Los científicos han sido capaces de poner en manos del hombre colosales energías que han servido entre otras cosas para crear un instrumento autodestructivo y cruel como el arma nuclear”

Ante esta situación reflexionaba que los intelectuales “podían quizás hacer un enorme servicio a la humanidad. No se tratará de salvarla en términos de milenios, tal vez ni siquiera en términos de siglos. El tema es que nuestra especie se encuentra ante problemas nuevos y no aprendió siquiera a sobrevivir.”

El comandante advertía desde los primeros tiempos de la Revolución los peligros que venían sobre nosotros. La batalla cultural que nos propuso hace años, era de una prioridad absoluta como la advertencia sobre el armamentismo nuclear, que es de tal magnitud que puede acabar la vida en el mundo en minutos y la destrucción de la naturaleza, cuyas consecuencias apocalíptica estamos viendo cada día.

Asimismo, Fidel diría que “pensadores eminentes ven con claridad que el sistema capitalista desarrollado marcha hacia un desastre humanitario. Nadie habría sido capaz de prever las nuevas situaciones que se van creando a lo largo del camino, y en nada se niega sino por el contrario, se confirman, las crisis que nos convirtieron en revolucionarios. Ahora no se trata de la inevitabilidad del camino de la sociedad, si no del derecho de la especie a una vida diferente por la cual no hemos dejado de luchar. Ni siquiera entre las religiones que postulan el apocalipsis, una idea en la que creen muchos, nadie que yo sepa sugirió que sería este milenio y mucho menos este siglo”.

“A la Humanidad hay que comenzar a salvarla ya” dijo Fidel en 2011 e incluso sentía que estábamos comenzando tarde este proyecto tan necesario para la sobrevivencia y el futuro del ser humano.

El mayor homenaje que podemos hacer al comandante Fidel Castro Ruz es que recurramos a toda forma de creatividad, utilizar la imaginación, tan poderosa en Nuestra América co teniendo el ejemplo de un pueblo y su dirigencia desde hace más de 60 años haciendo malabares increíbles de subsistencia y de resistencia para mantener los mayores logros revolucionarios.

El mejor homenaje que podemos hacer al comandante Fidel Castro Ruz es impedir que continúe el bloqueo criminal sobre un país que ha sembrado la solidaridad en el mundo, al que quieren exterminar con las nuevas sanciones aplicadas por los gobiernos de Estados Unidos.

¡Que saquen a Cuba ya de la lista de promotores del terrorismo y también a los países hermanos que están en la misma situación! Tenemos la obligación moral de hacer todo lo necesario para acabar con este crimen de lesa humanidad que es el bloqueo, y recurrir adonde tengamos que hacerlo, movilizarnos ya por la vida y contra el avance de la muerte, la destrucción, las guerras coloniales de este siglo y la sobrevivencia de la humanidad. No podemos continuar caminando en círculos. Hay una nueva situación en el mundo, ha comenzado un Nuevo Orden Mundial y esto nos obliga a romper con la inmovilidad.

Aprendamos del ejemplo de Cuba, de Venezuela, de Nicaragua (el supuesto eje del mal), es decir el mal ejemplo para los pueblos sometidos por el imperio que está en caída libre. Hay que animarse a levantar la voz, que no nos inmovilicen con chantajes de ninguna naturaleza. Hay que nombrar al enemigo en forma permanente, no con subterfugios ni ambigüedades. Eso es profundamente anti pueblos, es decir contra revolucionario. No es posible que sigamos sin decir basta al exterminio lento del pueblo palestino ante la mirada indiferente de una buena parte del mundo.

A Cuba “hay que salvarla Ya” lo que significaría la salvación de Nuestra América en la hora de la liberación definitiva.