Cuba indoblegable pese a reincorporación en lista terrorista de EEUU
Cuba mantiene hoy su determinación de no doblegarse y seguir batallando, pese a la reincorporación de la isla en la lista de países patrocinadores del terrorismo y demás acciones injerencistas en su contra.
CAPAC – fuente Prensa Latina
Así lo manifestaron la víspera las máximas autoridades de la nación caribeña, quienes consideraron que la designación de su país en el unilateral listado busca recrudecer la guerra económica desatada por Estados Unidos.
Al respecto, el presidente Miguel Díaz-Canel, subrayó que la medida de su par norteamericano Donald Trump es un acto de arrogancia y desprecio, que no sorprende y tiene fines de dominación.
Desde la red social X, denunció que la acción es además una burla y abuso que confirma el descrédito de los listados y mecanismos unilaterales de coerción del gobierno de Estados Unidos.
En esa plataforma, el canciller Bruno Rodríguez calificó esta y las demás nuevas medidas de Washington como «medievales y de retroceso civilizatorio».
Señaló que «ebrio de arrogancia, el presidente Trump decide sin razones que Cuba patrocina el terrorismo. Sabe que miente. Su empeño es incrementar el castigo y la guerra económica contra las familias cubanas».
Entretanto, el titular de la Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento), Esteban Lazo, señaló que la decisión de Trump «es contraria al sostenido y firme reclamo del pueblo cubano y de la inmensa mayoría de la comunidad internacional».
De manera similar se pronunció el secretario de Organización del Partido Comunista de Cuba, Roberto Morales, quien aseguró que la mayor de las Antillas continuará batallando «contra ese y todos los demonios que vengan desde la nueva administración estadounidense».
Este lunes, Trump revocó la orden de hace apenas seis días de su antecesor, Joe Biden, que excluyó a Cuba de la unilateral lista de países patrocinadores del terrorismo.
La medida es una de varias que el recién posesionado mandatario ha tomado en sus primeras horas en el cargo, relacionadas con órdenes y acciones de Biden que había considerado él dañinas, y de las cuales ha comenzado a deshacerse a través de una serie de órdenes ejecutivas.
El pasado 14 de enero, Biden tomó su decisión, aunque tardía, de que Cuba «ya no debería ser designada como Estado patrocinador del terrorismo».
Igualmente, emitió una exención para el Título III de la Ley Helms-Burton, también conocida como Ley Libertad, por un período de seis meses y rescindió el Memorándum Presidencial de Seguridad Nacional 5 de 2017 sobre la política hacia Cuba para eliminar la llamada lista restringida.
Cuba fue designada por Washington como «Estado patrocinador del terrorismo» en enero de 2021, en una de las últimas acciones de Trump antes de concluir su primer mandato.